Pajarillo - Luisa Elena Paesano

Partitura:
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Luisa Elena Paesano nació en Caracas el 21 de mayo de 1941, en el seno de una familia de músicos. Su abuela y tías paternas animaban las tertulias que comenzaban con autores clásicos como Chopin y Liszt, y terminaban con aires venezolanos. Su abuelo, José Tadeo Monagas, se decantó por el sonido criollo de la bandola.
“El recuerdo más bello que tengo de mi existencia fue cuando el piano llegó a mi casa. Tenía 4 años. Pasaba las 24 horas del día sentada frente a esa enorme caja armónica”. Así surgió, según contó en una entrevista grabada que reposa en los archivos de la Biblioteca Nacional de Venezuela, la pasión de esta insigne pianista y compositora venezolana por el instrumento musical de teclas bancas y negras.
De la mano del maestro Fredy Reyna, a los 11 años ingresó a la Escuela de Música Juan Manuel Olivares, bajo la dirección del maestro Juan Bautista Plaza. Según relató, fue entre los 13 y los 14 años cuando compuso su obra más conocida: El trancao, que suele ser reconocida como un estilo musical y que dio nombre al trío que conformó junto a destacados músicos. “Llegaba del colegio, me soltaba el cabello y me sentaba al piano a tocar. Gracias a que mi mamá me grabó sin que me diera cuenta fue que quedó registro de El trancao”, contó.
Posteriormente escribiría su insigne versión del joropo Pajarillo, donde elevó el género a un nivel superior, sin necesidad de recurrir a modernismos ni subterfugios polirrítmicos como sucede con mucha música venezolana de fusión hoy en día. Podemos considerar esta cualidad como lo más valioso de su aporte musical, porque sin alejarse de las más ortodoxas técnicas de composición, logra un lenguaje perfectamente reconocible, con una identidad propia que nadie le puede arrebatar.
Según dijo, su legado incluye unas 400 piezas escritas, aunque no todas fueron grabadas, incluyendo su primera composición: el valse Yolanda, que le dedicó a una prima. Sobre su inspiración, afirmó que las letras y melodías le llegaban de forma natural y contó la anécdota de Camino al calvario, que creó luego de ver una película sobre la vida de Jesucristo que la afectó.
Además de compositora y excelsa ejecutante del piano, Luisa Elena Paesano destacó como pedagoga y defensora de la música tradicional venezolana, que consideraba era desdeñada por los maestros de la academia, debido a su complejidad. “Nuestra música hay que sentirla. El éxito de El trancao es que, a esa edad le puse bajo y ese merengue se puso a valer”, recordó.
Su desaparición física, ocurrida el 3 de junio de 2019, enlutó el mundo de la cultura y la música nacional. Tenía 78 años pero dejó un vasto legado artístico de música venezolana para piano: decenas de valses, merenges, joropos, danzas, contradanzas, sonatas y varias suites con los estilos anteriores.
Sobre El Pajarillo
Según las investigaciones de Eleazar López Contreras, cronista musical, la historia del Pajarillo empieza con Doménico Scarlatti (hay varias obras en este canal), un músico nacido en Nápoles en 1685 de gran fama quien sería contratado para enseñar música a la Princesa Bárbara de Braganza en Portugal.
Esta princesa al casarse con Fernando VI se fue a vivir a Sevilla y Madrid, llevándose a su Maestro. Este encontró allí el Fandango haciendo furor en el pueblo andaluz por lo que compuso muchas canciones en este aire. Una de ellas se llama precisamente Fandango.
El fandango, tocado con guitarras, bandolas, cuatros y arpas comenzó a ser llamado joropo (tal vez del árabe sharab o xarop: jarabe) a mediados del siglo XVIII, y fue enriquecido por una variante llamada “pajarillo”, de origen italiano. La riqueza rítmica y sincopada de las creaciones que el clavecinista napolitano Doménico Scarlatti (1685-1757) tocaba en la Corte de España se filtró a toda España, porque él era el músico oficial de la lusitana Princesa María Bárbara de Braganza, que luego sería Reina de España, gracias a su matrimonio con Fernando VI. Elevado al principal maestro musical del reino, Scarlatti impuso su lenguaje musical en todo el país. Sus “ejercicios” para el clavecín imitaban el fandango y la jota aragonesa, los cuales habían sido el origen primario del joropo, que fue enriquecido por las formas impuestas por Scarlatti. Esa influencia, con ciertos giros reminiscentes de la guitarra, se extendió a sus discípulos y, en particular, al padre Antonio Soler. Traídos a Venezuela por algunos de sus músicos imitadores, su estructura rítmica y armónica, particularmente, en uno de sus famosos “ejercicios”, que estaban todos basados en una polifonía y contrapunto de cinco voces, alteró las figuras y las cadencias del joropo original y primario. Esas estructuras fueron condimentadas por el sabor criollo; de modo que se puede decir con certeza, que esos novedosos giros rítmicos de Scarlatti saltaron del clavecín al arpa, y así nació el pajarillo.
Fuentes:
cuentaelabuelo.blogspot.com/2...

[@hhugo9]

Muchas Gracias Por Tu Aporte, después de tanto tiempo de buscar esta pieza y otras de Luisa Elena Paesano Por Fin Encontré este canal y también Musescore, Te agradezco mucho por tu trabajo.

[@JuanGomez-wv7zo]

Por fin!!!!! He tratado de conseguir la partitura por meses, pero por fin he encontrado una versión (y, además, muy buena). Ya vi que has puesto el Trancao tambien en Musescore. Le doy miles de agradecimientos por su trabajo! Que vengan mas por favor!!!!!

[@parisfam1352]

El Si en octava superior (compas 105) realmente es bemol -no becuadro como esta en la partitura de youtube. Este pequeño error de transcripcion fue adecuadamente corregido en la partitura de musicscore.