Ortega y Gasset en diálogo y comentarios de Ignacio Gómez de Liaño y Agapito Maestre. Documento singular, inédito, iluminador y unificador de ideas y pensamientos del maestro de maestros, del filósofo español más influyente del siglo XX en Europa. Documento histórico, no sólo por las excelencias del aludido, sino por las personalidades que alustran al gran filósofo. Dos grandes autores y filósofos de madurez y obra contrastadas exponiendo las dimendiones más relevantes del pensamiento orteguiano: la política, la social y la individual. Agapito Maestre incide en la gran preocupación de Ortega hasta el año 32: la formación de un Estado-nación que acoja y proteja la libertad individual de los ciudadanos. Ignacio Gómez de Liaño expone la dimensión del desarrollo individual del hombre en sociedad, señalando también la preocupación orteguiana por la garantía y respeto que necesita esa convivencia. En síntesis: crear Estado-nación y sociedad para garantizar las libertades y el desarrollo de la individualidad de cada ciudadano. Los dos realzan la capacidad de Ortega a la hora de desarrollar su pensamiento en función de los cambios sociales y hallazgos de conocimiento que se van produciendo: filósofo en cambio y revisionista de sus propias teorías. Ortega y Unamuno enfrentados: europeizar España o españolizar Europa. Con el paso del tiempo lo vemos con una perspectiva más clara: si era malo para España el habitar permanente en el tradicionalismo cerrado a los avances de la modernidad, de la razón ilustrada; también fuera pernicioso olvidarse de la identidad tradicional y ofrecerse vacía de raíces identitarias en los brazos de la razón ilustrada que tantos conflictos fue causando en la época moderna europea. El que redacta estas líneas imagina una aportación de pensamiento ortega-unamuniano para la actual encrucijada europea: La Europa actual, incluída España, está obligada a encontrar en su tradición histórica, religiosa y cultural sus señas de identidad armonizadas, depuradas y destiladas por el peso de las experiencias y los errores acontecidos en este último siglo. Una prueba de gran envergadura para no seguir perdiendo los valores democráticos y el estado de civilización alcanzado en este continente, que sirvió de modelo para el resto. Esta aportación no es singular, ya está muchas veces expresada, insértola aquí muy aquilatada y creo que suficientemente enlazada. 😊
Es imposible hacer filosofía sin literatura, 7:12. ¡Viva la Hispanidad, abajo la leyenda negra y el protestantismo! Y Ortega y Gasset era negrolegendario.
Ortega y Gasset en diálogo y comentarios de Ignacio Gómez de Liaño y Agapito Maestre. Documento singular, inédito, iluminador y unificador de ideas y pensamientos del maestro de maestros, del filósofo español más influyente del siglo XX en Europa. Documento histórico, no sólo por las excelencias del aludido, sino por las personalidades que alustran al gran filósofo.
Dos grandes autores y filósofos de madurez y obra contrastadas exponiendo las dimendiones más relevantes del pensamiento orteguiano: la política, la social y la individual.
Agapito Maestre incide en la gran preocupación de Ortega hasta el año 32: la formación de un Estado-nación que acoja y proteja la libertad individual de los ciudadanos.
Ignacio Gómez de Liaño expone la dimensión del desarrollo individual del hombre en sociedad, señalando también la preocupación orteguiana por la garantía y respeto que necesita esa convivencia.
En síntesis: crear Estado-nación y sociedad para garantizar las libertades y el desarrollo de la individualidad de cada ciudadano.
Los dos realzan la capacidad de Ortega a la hora de desarrollar su pensamiento en función de los cambios sociales y hallazgos de conocimiento que se van produciendo: filósofo en cambio y revisionista de sus propias teorías.
Ortega y Unamuno enfrentados: europeizar España o españolizar Europa.
Con el paso del tiempo lo vemos con una perspectiva más clara: si era malo para España el habitar permanente en el tradicionalismo cerrado a los avances de la modernidad, de la razón ilustrada; también fuera pernicioso olvidarse de la identidad tradicional y ofrecerse vacía de raíces identitarias en los brazos de la razón ilustrada que tantos conflictos fue causando en la época moderna europea.
El que redacta estas líneas imagina una aportación de pensamiento ortega-unamuniano para la actual encrucijada europea:
La Europa actual, incluída España, está obligada a encontrar en su tradición histórica, religiosa y cultural sus señas de identidad armonizadas, depuradas y destiladas por el peso de las experiencias y los errores acontecidos en este último siglo.
Una prueba de gran envergadura para no seguir perdiendo los valores democráticos y el estado de civilización alcanzado en este continente, que sirvió de modelo para el resto.
Esta aportación no es singular, ya está muchas veces expresada, insértola aquí muy aquilatada y creo que suficientemente enlazada. 😊
Es imposible hacer filosofía sin literatura, 7:12. ¡Viva la Hispanidad, abajo la leyenda negra y el protestantismo! Y Ortega y Gasset era negrolegendario.