Los Petroglifos de Zalamea

Ruta patrimonial por Zalamea la Real. Partimos de la vieja estación ferroviaria de Riotinto, construida en 1904. Se trata de una línea férrea de pasajeros para trasladar trabajadores a las minas desde Zalamea, El Campillo y Traslasierra. De ahí vamos por la vía verde hasta la antigua estación ferroviaria de la mina de Buitrón, hoy en ruinas. Visitamos también el pequeño núcleo poblacional que se creó alrededor de la estación. De aquí cruzamos por la carretera hasta el pilar aledaño a la vieja fábrica de anisados y el mercado, creado por los ingleses para atender a una población cada vez más numerosa, que en 1910 llegó a los 13.000 habitantes, por los 3.000 con los que cuenta en la actualidad. Seguimos subiendo hasta la parte más alta del pueblo, donde se ubica la iglesia parroquial columnada. Pasamos por la calle Castillo, una de las más hermosas y antiguas, donde la Casa Cilla y la vivienda del cura. Nos acercamos al Ayuntamiento, de arquitectura regionalista, de principios de siglo. Compramos churros en un puesto y tomamos café en alguno de los tres bares del centro de la villa. Nos acercamod a la plaza dedicada a las siete aldeas del municipio. Bajamos del punto más elevado del pueblo hasta la Fuente de las Indias, conocida antes como El Cañuelo, y reformada en el siglo XVIII gracias a la aportación económica de un indiano. Desde aquí nos trasladamos a una fuente recuperada por los vecinos del municipio, cruzamos en la carretera a El Villar, bajamos por una calleja al valle Redondo y accedemos a los petroglifos, grabados rupestres del segundo milenio antes de Cristo. Se remontan a la Prehistoria, específicamente a la Edad del Cobre y la Edad del Bronce, alrededor del tercer milenio antes de Cristo. Estos grabados rupestres son muestras de arte prehistórico que se encuentran en diversas zonas de la península ibérica. El origen del pueblo de Zalamea se remonta a la época de la dominación musulmana en la península ibérica, alrededor del siglo IX. Luego realizamos una empinada subida hasta el recinto Romero, nos pasamos por el Pilar Viejo y el Pilar Nuevo, situados en una cañada real, accedemos a la vía verde y regresamos a la estación de Riotinto, donde finalizamos la visita con una comida de convivencia.