SUR al volante: probamos el Audi Q3 Horizontal 1

Los SUV están de moda, al menos en el viejo continente, eso es indiscutible. Tal es la obsesión del mercado por esta nueva tipología de vehículos que se están comiendo a otras muchísimo más asentadas. Se han llevado por delante a los sedanes, que apenas sobreviven a duras penas gracias a las marcas más aspiracionales. A los familiares de toda la vida, a los monovolúmenes… pero también han acelerado la desaparición de conceptos menos populares, como los cupés, aquellos vehículos con un enorme atractivo donde el pilar trasero se inclina para unirse con el portón del maletero.
Las marcas, conscientes del atractivo de esta tipología, lejos de dejarla desaparecer, la han adaptado a los vehículos de moda. Nacen así los SUV cupés. El vehículo supeditado a la estética al cuadrado. Concepto que, por cierto, inventó Ssanyong con el Actyon y no BMW con el X6 como la gran mayoría de gente piensa.
En 2018 Audi decide entrar en este mercado, relativamente incipiente, con el Audi Q8 para reclamar su porción del pastel. Fruto de su éxito nace la versión reducida y 'asequible' (queden claras las comillas) del nuevo buque de Audi, el Q3 Sportback. Un mini Q8 que atrapa miradas allá por donde va gracias a su estética heredada de su hermano mayor.