Dibujando la Esclerosis Múltiple: Síndrome Radiológico Aislado

El acceso universal a pruebas diagnósticas como la resonancia magnética ha resultado en su sobreutilización para diversas condiciones, incluyendo dolores de cabeza, traumatismos y mareos. A menudo, estas resonancias muestran lesiones inespecíficas de sustancia blanca, pero en ocasiones, presentan características que recuerdan a la esclerosis múltiple. En 2009 se definió el síndrome radiológico aislado, refiriéndose a la aparición de lesiones en resonancia magnética sin síntomas clínicos de esclerosis múltiple u otras enfermedades desmielinizantes. Los criterios para este síndrome fueron revisados en 2018 para hacerlos más específicos. Factores como el aumento de lesiones en el tiempo, lesiones captantes de gadolinio, presencia de bandas oligoclonales en el líquido cefalorraquídeo, y alteraciones cognitivas aumentan la probabilidad de desarrollar esclerosis múltiple.
Actualmente, no se recomienda tratamiento para pacientes con síndrome radiológico aislado, ya que muchos nunca desarrollarán síntomas asociados a las lesiones craneales. Sin embargo, la decisión de tratar debe ser individualizada, con seguimiento estrecho mediante resonancias y visitas frecuentes, especialmente en pacientes mayores con factores de riesgo cardiovascular. Las recomendaciones actuales sugieren realizar resonancias anuales o semestrales en pacientes con mayor riesgo de conversión a esclerosis múltiple y evaluaciones neuropsicológicas para detectar progresión. Los pacientes deben estar entrenados para reconocer síntomas de posibles brotes.
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