Como bien dices, Arturo, no somos el mejor ejemplo para que la máquina aprenda. No hemos evolucionado moralmente lo suficiente como para crear una inteligencia artificial autónoma. No hay más que ver las desigualdades que hay en el mundo como para adivinar la catástrofe que puede significar una inteligencia artificial en manos que no debe estar o sirviendo intereses que no debe servir. Internet que la construimos personas ya es territorio comanche. Si el propio hombre con toda su evolución demasiadas veces no parece distinguir lo que es ético de lo que no...dar autonomía a las máquinas programadas por unas mentes inmorales ya te imaginas lo que puede ser
Como bien dices, Arturo, no somos el mejor ejemplo para que la máquina aprenda. No hemos evolucionado moralmente lo suficiente como para crear una inteligencia artificial autónoma. No hay más que ver las desigualdades que hay en el mundo como para adivinar la catástrofe que puede significar una inteligencia artificial en manos que no debe estar o sirviendo intereses que no debe servir. Internet que la construimos personas ya es territorio comanche. Si el propio hombre con toda su evolución demasiadas veces no parece distinguir lo que es ético de lo que no...dar autonomía a las máquinas programadas por unas mentes inmorales ya te imaginas lo que puede ser
Felicidades Arturo, te deja pensando