Al mundo sólo le quedan 49 cosechas

Cada 17 de junio se conmemora el Día Mundial para Combatir la Desertificación y la Sequía con el fin de concienciar sobre la importancia de la conservación de los suelos.
Recurrimos a la voz del gran Jairo Restrepo, que habló sobre esto en su última visita a Córdoba el año pasado.
Los procesos de desertificación se producen por la desaparición de la cubierta vegetal que mantiene la capa fértil del suelo, debido a los desmontes para el avance de la frontera agropecuaria, así como el sobrepastoreo y la agricultura intensiva.
En estas circunstancias, el viento y el agua se encargan del resto. Agravan la situación arrastrando la capa superficial de suelo fértil, dejando atrás tierras improductivas.
La persistencia de esta combinación de factores acaba por convertir las tierras degradadas en desiertos. Esto acarrea problemas de salud, inseguridad alimentaria y migración forzada.
Es por ello, que desde Sayri y Gaia destacamos la importancia de sostener un modelo productivo que busque regenerar los suelos, evitando las consecuencias irremediables que acarrean los procesos de desertificación y por consecuencia, el cambio climático.
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