Pido disculpas por la presunción. Contaré algunas experiencias que he tenido con Hugo. En mi adolescencia y hasta mis 29 años, entre el '71 y el '88 fui vecino de él, en el mismo edificio de 25 de Mayo 786, entre Córdoba y Viamonte, en pleno microcentro de Buenos Aires. Coincidentemente, a mis trece años comencé a escucharlo. Me atrapó con su música (puedo decir que él influyó en gran parte de mis gustos musicales, con George Gershwin, con el rock sinfónico de King Crimson, con ciertos intérpretes de tango y de música andina). De a poco fui disfrutando de sus reflexiones y si bien no siempre estuve de acuerdo en lo que decía, admiraba su coraje y seguridad. Pero voy a aportar algo que sólo viví yo. Entiendan que todo lo que voy a decir es con cariño. Todos tenemos derecho a la privacidad, especialmente los famosos. Cuando me animé a ir más allá de una charla en el ascensor, cada tanto me presentaba en su oficina del piso 8° (entre el '75 y el '82), dos pisos más arriba del mío, con cualquier excusa. Generalmente me atendían sus dos secretarias, pero aveces estaba él también. Toda una pared, de arriba abajo, estaba repleta de discos LP. Muchos de ellos eran de los que las discográficas repartían en los medios de difusión, con el sello de PROHIBIDA SU VENTA, para promocionar su música. Cuande él estaba (o en el ascensor), él conversaba conmigo como puede conversa una persona famosa de cincuenta y pocos años, con un adolescente amedrentado de aquella época, charlaba de generalidades y siempre lograba hacerme hablar a mí, permitiéndose él no ventilar nada personal. Una vez yo le presté un disco que sabía que él no tenía, para que pase un tema en particular de ese LP en su programa y lo hizo; sí, leyeron bien. Pero luego pasaban las semanas y no me lo devolvía. Así que, con paciencia, empecé a reclamárselo. En consecuencia un día suena el timbre de mi departamento (donde vivía con mi mamá) y era él, en persona, con una pila de mas de veinte LPs, y arriba de ellos, el mío, en recompensa por la demora. En otra oportunidad, yo, envalentonado, lo invité a tomar el té a mi casa. Él aceptó... pero no fue. Recuerden que no lo estoy criticando. Cuando las personas son reservadas, aveces hacen eso; tal vez no negarse, para no incomodar. En otra oportunidad, en el en enero del '82, con veintitrés años, yo me iba a estudiar francés a la Alianza Francesa de París. En, noviembre o diciembre, sabiendo esto, él me dice: "Venite a mi estudio mañana a las once de la mañana..." (en el piso 11 -si recuerdo bien- donde, como bien dicen ustedes, él producía integralmente todo su programa de radio) "...que te voy a dar la dirección de Jairo, en París, para que lo visites. Yo voy a estar grabando mi programa." A mí me pareció muy extraño, pero fui. Al golpearle la puerta (no tenía timbre, exprofeso), efectivamente él grababa. No detuvo la grabación, me abrió y yo no me animaba a entrar. "Pasa, pasa. No seas tímido." Yo entré, vi por única vez su estudio con el boom colgando frente a una ventana que daba al hueco de ventilación del edificio entre el segundo cuerpo (el nuestro) y el primero. Creo recordar un atril con papeles y por supuesto, su grabador de cinta abierta girando y sus dos bandejas giradiscos. Si alguno de ustedes recuerda, en medio de una tanda publicitaria, una charla de él con un chico temeroso de hablar, ese era yo. Por supuesto, la dirección de Jairo, nunca me la dio y yo entendí que fue su excusa para hacer lo que hizo, que esa charla conmigo, fue el verdadero motivo de su invitación. A mi vuelta de Europa mi mamá murió, seis años más tarde yo me mudé, hoy vivo, feliz, en la Patagonia y lo único que me queda, es gratitud hacia una persona que me enseñó cómo ser fiel a mí mismo y con la que tuve las primeras situaciones en mi vida (al menos que me diera cuenta) en las que yo aprendí a respetar, las elecciones y las decisiones del prójimo. Gracias querido Hugo.
Muy buena historia. Hace dos semanas descubrí la existencia de Hugo aquí en TH-cam y cada día pongo sus videos para aprender... siempre se aprende algo.
Nunca oí esa conversación. Pero Hugo daba su número de teléfono (seguramente de su oficina) al aire, y no recuerdo si hasta figuraba en guía telefónica.
@@antigonavelez Esa tanda publicitaria que interrumpió para hablar con migo en persona (en su estudio), no por teléfono, se emitió al día siguiente, en uno de los "Reencuentro", de diciembre de 1981, que eran por la tarde, creo que por Radio Continental.
Repito lo que dije en la contestación anterior. Ya estoy escuchando esta grabación, y le digo que Yo ese día la escuche, tiene en sus manos una reliquia mas, de este genio de la radiofonia.
MAESTRO/ PIONERO : escuchaba y me educaba con la sabiduría del Gran Guerrero Martinheitz por esos años y cuanto le agradezco todo lo que aprendí de sus emisiones radiales !! No estabas equivocado : haz sido un PROFESIONAL INTEGRO !!!
Ademas le agrego, acerca del comentario de las marcas, ya en esos días, Yo discutida eso con mis amigos y familiares, y tuve mis grandes "peleas" verbales. En fin, tengo una "muletilla" que dice; La inteligencia tiene limites, la estupidez, No, y mientras venda mas un "culo" que un libro, así estaremos.
Lo pongo en el anochecer y me hace dormir tranquilo
Pido disculpas por la presunción. Contaré algunas experiencias que he tenido con Hugo.
En mi adolescencia y hasta mis 29 años, entre el '71 y el '88 fui vecino de él, en el mismo edificio de 25 de Mayo 786, entre Córdoba y Viamonte, en pleno microcentro de Buenos Aires. Coincidentemente, a mis trece años comencé a escucharlo. Me atrapó con su música (puedo decir que él influyó en gran parte de mis gustos musicales, con George Gershwin, con el rock sinfónico de King Crimson, con ciertos intérpretes de tango y de música andina). De a poco fui disfrutando de sus reflexiones y si bien no siempre estuve de acuerdo en lo que decía, admiraba su coraje y seguridad.
Pero voy a aportar algo que sólo viví yo. Entiendan que todo lo que voy a decir es con cariño. Todos tenemos derecho a la privacidad, especialmente los famosos. Cuando me animé a ir más allá de una charla en el ascensor, cada tanto me presentaba en su oficina del piso 8° (entre el '75 y el '82), dos pisos más arriba del mío, con cualquier excusa. Generalmente me atendían sus dos secretarias, pero aveces estaba él también. Toda una pared, de arriba abajo, estaba repleta de discos LP. Muchos de ellos eran de los que las discográficas repartían en los medios de difusión, con el sello de PROHIBIDA SU VENTA, para promocionar su música. Cuande él estaba (o en el ascensor), él conversaba conmigo como puede conversa una persona famosa de cincuenta y pocos años, con un adolescente amedrentado de aquella época, charlaba de generalidades y siempre lograba hacerme hablar a mí, permitiéndose él no ventilar nada personal.
Una vez yo le presté un disco que sabía que él no tenía, para que pase un tema en particular de ese LP en su programa y lo hizo; sí, leyeron bien. Pero luego pasaban las semanas y no me lo devolvía. Así que, con paciencia, empecé a reclamárselo. En consecuencia un día suena el timbre de mi departamento (donde vivía con mi mamá) y era él, en persona, con una pila de mas de veinte LPs, y arriba de ellos, el mío, en recompensa por la demora.
En otra oportunidad, yo, envalentonado, lo invité a tomar el té a mi casa. Él aceptó... pero no fue. Recuerden que no lo estoy criticando. Cuando las personas son reservadas, aveces hacen eso; tal vez no negarse, para no incomodar.
En otra oportunidad, en el en enero del '82, con veintitrés años, yo me iba a estudiar francés a la Alianza Francesa de París. En, noviembre o diciembre, sabiendo esto, él me dice: "Venite a mi estudio mañana a las once de la mañana..." (en el piso 11 -si recuerdo bien- donde, como bien dicen ustedes, él producía integralmente todo su programa de radio) "...que te voy a dar la dirección de Jairo, en París, para que lo visites. Yo voy a estar grabando mi programa." A mí me pareció muy extraño, pero fui. Al golpearle la puerta (no tenía timbre, exprofeso), efectivamente él grababa. No detuvo la grabación, me abrió y yo no me animaba a entrar. "Pasa, pasa. No seas tímido." Yo entré, vi por única vez su estudio con el boom colgando frente a una ventana que daba al hueco de ventilación del edificio entre el segundo cuerpo (el nuestro) y el primero. Creo recordar un atril con papeles y por supuesto, su grabador de cinta abierta girando y sus dos bandejas giradiscos. Si alguno de ustedes recuerda, en medio de una tanda publicitaria, una charla de él con un chico temeroso de hablar, ese era yo. Por supuesto, la dirección de Jairo, nunca me la dio y yo entendí que fue su excusa para hacer lo que hizo, que esa charla conmigo, fue el verdadero motivo de su invitación.
A mi vuelta de Europa mi mamá murió, seis años más tarde yo me mudé, hoy vivo, feliz, en la Patagonia y lo único que me queda, es gratitud hacia una persona que me enseñó cómo ser fiel a mí mismo y con la que tuve las primeras situaciones en mi vida (al menos que me diera cuenta) en las que yo aprendí a respetar, las elecciones y las decisiones del prójimo.
Gracias querido Hugo.
Hermosa historia señor. Saludos!
Muy buena historia. Hace dos semanas descubrí la existencia de Hugo aquí en TH-cam y cada día pongo sus videos para aprender... siempre se aprende algo.
Nunca oí esa conversación. Pero Hugo daba su número de teléfono (seguramente de su oficina) al aire, y no recuerdo si hasta figuraba en guía telefónica.
@@antigonavelez Esa tanda publicitaria que interrumpió para hablar con migo en persona (en su estudio), no por teléfono, se emitió al día siguiente, en uno de los "Reencuentro", de diciembre de 1981, que eran por la tarde, creo que por Radio Continental.
Que buen recuerdo de alguien muy admirable
Siempre lo admiré y a pesar del tiempo, lo sigo haciendo. Gracias, Negro querido!
Negro querido. Unico, irrepetible, genial. Gracias por compartir!!!
Una voz inolvidable, entrañable. Gracias Sr. Jorge por su deferencia en digitalizarlo y compartirlo.
Repito lo que dije en la contestación anterior. Ya estoy escuchando esta grabación, y le digo que Yo ese día la escuche, tiene en sus manos una reliquia mas, de este genio de la radiofonia.
Un grande de la radiofónica argentina y como persona gracias negro querido
Gracias por compartir..cuánto lo necesitamos..dónde estés Dios te tenga en sus brazos!
Un grande de la radio!!!
Un maestro que me acompaño toda mi juventud
MAESTRO/ PIONERO : escuchaba y me educaba con la sabiduría del Gran Guerrero Martinheitz por esos años y cuanto le agradezco todo lo que aprendí de sus emisiones radiales !! No estabas equivocado : haz sido un PROFESIONAL INTEGRO !!!
Una vez el gran artista Enrique Pinti dijo que el mejor programa de radio de la historia fue el show del minuto,queda claro porque lo dijo
Eterno!
Yo era chica y lo escuchaba. Anotaba las frases de hugo en un cuaderno!!
GRACIAS ME RECUERDA MI JUVENTUD ... RECUERDO EL RUIDO DE ARRANCAR LAS HOJAS CUANDO NOS LEIA UN LIBRO....!!!! GRACIAS...!!!!
GRACIAS A ÉL ADQUIRÍ EL HÁBITO DE LA LECTURA, LO ESCUCHABA ATENTAMENTE EN LR3 CON SUS CUENTOS, TE RECORDAREMOS SIEMPRE!
Gracias a los Chicos de Antes que Nadie (Luzu TV), ahora sé quien fue este gran personaje
Ademas le agrego, acerca del comentario de las marcas, ya en esos días, Yo discutida eso con mis amigos y familiares, y tuve mis grandes "peleas" verbales. En fin, tengo una "muletilla" que dice; La inteligencia tiene limites, la estupidez, No, y mientras venda mas un "culo" que un libro, así estaremos.
un grande
👍👍
Está acelerado el audio.Su voz era mas grave.
Era tan capaz, que hacía todo él