Cuanta misericordia! !! No merezco ni siquiera estar escuchando este mensaje!!! Gracias Señor por pagar nuestras culpas en la cruz!! Quiero saber más y más de Jesús! ! Que bendición nos alcanza Dios día a día sin merecerlo! ! Toda la gloria es para el!!
Tremenda palabra gracias a Dios por su vida pastor Sugel, bendigo su vida y la de su familia que Dios siga dando sabiduría y revelación a su vida y sobre todo temor de Dios en su corazón bendiciones
Doy gracias a Dios por la vida del Pastor Sugel, sus enseñanzas biblicas a traves de predicaciones expositivas, han sido de gran bendición y crecimiento espiritual.
Que bello Evangelio Eterno le doy Gloria y Honra al Dueño del Evangelio de vida Eterna al único Dios Todopoderoso de toda Gracia al eterno amoroso Dios de Amor Jesucristo 😘 Aleluya 🙌 Gloria y honra al Eterno Dios vivo Jesucristo 😇 estoy loco cada dia por mi bello Jesús Gran milagro hizo en Mi 😘😘😘 como no seguirlo hasta verle cara a cara a mi Creador Jesucristo 😇 😘
No se si es la misma que le había enviado pero no me voy a poder comprar Nda perdón por la demora en la respuesta pero no pude ir a la clase de ayer y no pude 77777777777777777777777777777777777777777777777777777777777777777777i
Gracias a Jesucristo Salvador los permitio un dia mas de vida a todo serhumano a pesar de nuestros pecados y faltas que come temos en el diario de la Vida saludos todos hermanos y hermanas de la .IBSJ 🙏 🙏
La predicación expositiva es en mi opinión el mejor método de predica y estudio biblico. Gracias Dios mio por todos estos recursos que tenemos a la mano. Dios bendiga este ministerio. 🙏
Bendito sea el Señor por permitirnos cada día conocer más de el a través de su palabra y de predicaciones cómo está, gracias amado hermano y Pasto suchel,,que el Señor me muestre siempre a la luz de la escritura que solo en el hay salvación , y muy claro algo que usted dijo fervor sin conocimiento es igual a fanatisco, por eso mi anhelo es conocer a Jesucristo,gracias por cada una de sus palabras en esta prédica , Dios le bendiga
GLORIA a DIOS y bendiciones por la palabra que nuestro señor siga bendiciendo su vida y su caminar con el y ayudándonos a ver las maravillas de el BENDITO SEA DIOS
Alabado sea eternamente el Santo nombre del Señor JESUCRISTO, Excelente mensaje A DIOS Gracias por este barón que está parado en la brecha. DIOS le fortalezca el ministerio que le ha sido dado, N L Santo nombre de JESÚS.!
Past. Sugel, io sto escuchando il messaggio probablemente 3 años después. He puso stop al minuto 10.... La elección es per Gracia. La Salvación es condiciónada.... Entonces, eres tú past. Sugel, arminiano? He escuchado la clase de armininians y mi párese que encaja plenamente tu visión con la mía. Yo soy arminiano, como Ravenhill, Weasley, Whitefield ma tu? Aún, muy querido past. tu dices que professes la confesión de Londres a mi parece el contrario. p.s. "Querido Past" no es una burla. Lo pienso de verdad. Estoy muy agradecido a DIOS por usted. Me encanta como esplicas La Escritura. Escucho sus sermones mayor tiempo en mi trabajo. DIOS lo bendiga mucho. Con afecto.
aunque no entrndi bien el mesaje sobre el escandalo de la cruz pero fue un tremendo mensaje entendi mucha cosa inportante que DIOS LE BENDIJA GRANDEMENTE sugel y que la paz de DIOS SEA CONTIGO Y CON TU CASA
Es sencillo, cuando el dijo que personas que quieren vivir su propia vida y si les hablas el mensaje de la cruz no quieren oírlo pq la Palabra de Dios desnuda al pecador y se ESCANDALIZAN piensan que vivir como dice Dios es un cuento de los que verdaderamente Creen en el EVANGELIO, Dtbg Todo el Camino 🙏🏿
Sinceramente hubiese más de estas prédicas en nuestros sitios donde nos reunimos a escuchar palabra de Dios la gente que sigue sinceramente a Dios estaríamos transformando a muchas personas
Totalmente de acuerdo Son contados los pastores que predican el verdadero evangelio. A las iglesias que iba ninguna prédica la sana doctrina Y desde que estoy escuchando estás enseñanzas Dios me abrió el entendimiento que andaba en iglesias falsas Dios envíe pastores que hablen de la verdad .y no del bienestar material y bendiciones solo aquí en la tierra porque en eso reducen el evangelio
GLORIA A DIOS POR LA JUSTICIA DE DIOS ! ES UNA JUSTICIA QUE PROVIENE DE LA FE. ! PORQUE EL FIN DE LA LEY ES CRISTO, PARA JUSTICIA A TODO AQUEL QUE CREE, ES DECIR , CRISTO VINO PARA CUMPLIR LA LEY ( Mt. 5: 17 ) A FIN DE TERMINARLA Y REEMPLAZARLA ( Mt. 8: 3-4 ). POR LO TANTO, TODO AQUEL QUE CREE EN CRISTO RECIBE LA JUSTICIA DE DIOS, LA CUAL ES CRISTO MISMO. SENCILLO ! EL QUE CREE RECIBE ! LLEGA A SER JUSTO SENCILLAMENTE POR CREER, PROVIENE DE LA FE. ABRAHAM LE CREYÓ A DIOS Y LE FUE CONTADO POR JUSTICIA, DIOS LO JUSTIFICO EN EL ACTO. !
Excelente mensaje aclarativo de la Gracia pastor Sugel, solo una observacion; su oracion inicial min 1:00 no coincide al orden cronologico de los hechos que han de suceder en los dias del arrebatamiento de la iglesia(los santos). Primero, arrebatara a Su iglesia. Segundo, descendera del cielo despues de los 7siete años de la gran tribulacion. Que mis palabras no sean piedra de tropiezo para nadie, pues no son mias, sino Del Señor. Bendiciones iglesia🙏
El fanatismo es el accionar que surge en busca del mérito o justicia propia, mientras el fervor es el accionar que surge del agradecimiento de lo hecho por Dios en nuestro Señor Jesucristo.
Hola amado Sugel, mi marido no pretende llegar al cielo por obras, bueno fuera. El cree que Dios lo va a juzgar conforme él (mi marido), cree. O sea, que todo está bien, que no me preocupe.
Es cierto que cuando se enfatiza en un versículo mas que en otros, caricaturiza la verdad biblica, esto mismo pasa cuando se estudia la forma de orar segun la biblia, donde al hacer enfasis exagerado en el verso donde dice, supuestamente, que no se debe repetir oraciones, se entra a deformar toda la verdad bíblica sobre este tema. Pues en otros pasajes biblicos encontramos a Jesucristo repitiendo oraciones, tambien nos enseña una oración, el padre nuestro, para que lo repitamos. Entonces, se concluye que ese enfasis exagerado ha distorsionado la verdadera enseñanza biblica sobre la oración.
CONSIDERACIONES BÁSICAS (1) EL PROPÓSITO DE LA LEY: Desde el principio, Dios escogió a Abraham [con Isaac y Jacob (Israel), que es la línea genética según Su promesa a aquel, puesto que Abraham tuvo más hijos) para bendecirlo, y como medio de bendición al resto de la humanidad (los gentiles). (Gn.12:2-3; 28:14; Hch.3:25). Eso no lo hizo por medio de un pacto, puesto que no dice, “si haces esto, Yo haré lo otro”, o bien “éste será Mi compromiso contigo, si tú cumples estos requisitos”; sino que Dios en Su soberanía escoge a Abraham y le da una promesa, Ro. 4:13; 9:8; Gá. 3:29; 4:23, De esa forma, puede decirse que Israel ha actuado como un “plan piloto” de Dios, para la humanidad. Eso lo enseñan las Escrituras muchas veces, cuando dicen que ellos son Sus testigos escogidos con la finalidad de que el resto de las naciones (algo que sólo existe en la tierra) Lo conozcan (entiendan algo de Su carácter, y Sus procederes), y Lo glorifiquen (alaben, adoren, bendigan, honren, etc.). Esa es la explicación de las frases bíblicas donde dice “al judío, primeramente, y después al griego” (Hch. 3:26; 13:14; Ro. 1:16, etc.). NOTA 1: La Ley (que formaría parte de lo que las Escrituras a veces llaman “pacto”), vino 430 años después de la promesa (Gá. 3:17). La función predominante de la Ley dada a Israel por medio de Moisés es para que la humanidad entera (Israel, y el resto de la humanidad) entienda que Dios tiene unos requerimientos universales sobre todo ser humano. De ahí se derivan las otras funciones de la Ley (exceptuando los capítulos que tratan de los rituales, sacrificios y ofrendas, los cuales introducen -rudimentariamente- la noción del perdón, por medio de “la sangre” y “la ofrenda” de algo extremadamente puro y de valor para Dios). Él, como Creador del universo, y Autor de la vida, tiene Sus principios. Éstos son normativos para toda criatura (en toda cultura, época y nación). Para darlos a conocer de manera explícita (a la humanidad), Dios dio a Israel una ley escrita, aunque en tablas de piedra, lo cual representa -al menos- dos cosas: a) que esas normas o mandamientos, que debían estar sensibles/activos en el corazón de los hombres, tuvieron que llegar a ser algo externo al ahombre mismo: con el devenir de la historia Dios hubo de dárselas (recordárselas) en un soporte fuera del hombre (para que tuviera referencias objetivas del “Manual de funcionamiento” de las relaciones interpersonales humanas, y con el propio Dios), y b) la dureza del corazón humano, al que figuradamente esas tablas de piedra representan (Ez. 11:19; 36:26; 2 Co. 3:3). Así que la Ley formal que Dios dio a Israel, por medio de Moisés, no tiene nunca como propósito calificar a alguien como “aceptable” a Dios (puesto que eso es imposible, Ro. 8:3). Ni siquiera al Señor Jesucristo (si la hubiera obedecido) lo hubiera calificado como “perfecto/adecuado” para el sacrificio y la ofrenda que iba a hacer de Sí mismo. La Ley mosaica, en la parte que llamamos Decálogo (o Ley moral) viene a ser un código de conducta básico, rudimentario (por cuanto contiene nociones poco profundas respecto al carácter de Dios y Sus requerimientos al hombre, del Cual él es imagen y semejanza), y preliminar o preparatorio para la fe que vendría después, Gá. 3:23; 4:3, 9; Col. 2:20; He. 5:12; 6:1; 8:5, etc.). NOTA 2: De los 10 preceptos de esa parte de la Ley sinaítica, sólo 2 están formulados en forma positiva. Los otros 8 son prohibiciones; lo cual denota que son “luces rojas” que el hombre no debía traspasar. Eso evidencia estar tratando con una naturaleza impotente y corrupta (no ya que no fuera capaz de hacer el bien, sino que de ningún modo podía refrenarse del mal), cosa que el Señor Jesucristo nunca tuvo. Ni siquiera sobre la cruz, donde legalmente fue “hecho” (considerado, tenido) como pecado; no como pecador. LA INCONGRUENCIA Y LA FALACIA DEL “EVANGELIO” QUE ENSEÑA QUE CRISTO OBEDECIÓ LA LEY POR EL PECADOR: Si el Señor Jesucristo se hubiera colocado bajo la ley, con la finalidad de obedecerla, aunque solo fuese en representación del pecador elegido, se hubiera puesto en el brete de afirmar con ello tener una naturaleza pecadora, que precisaba “frenos” para evitar caer en aquellas cosas superficiales que desagradan a Dios, pues allí son vistas de un modo rudimentario y sin calado, Mt.5:21-43). Si Él hubiera hecho tal cosa, durante Su vida, hubiera simulado ser carnal, impuro, y en tal caso se hubiera hallado engaño en Él (1 P. 2:22), pues la Ley no fue dada para el justo, sino para los transgresores y desobedientes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, para los fornicarios, para los sodomitas, para los secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a la sana doctrina” (1 Ti. 1:9-10). Haberse colocado bajo esa Ley, con el fin de obedecerla en lugar de los pecadores a quienes vino a salvar, hubiera denotado que a ellos les hacía falta la justica “que es por la le” (la ley de las obras). Y eso es una contradicción flagrante del Evangelio, pues el Evangelio dice: “¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras? No, sino por la ley de la fe. Concluimos, pues, que el hombre es justificado por la fe sin las obras de la Ley” (Ro. 3:27-28). Y es que el Evangelio, merced a que siempre fue atacado por los legalistas, está ampliamente desarrollado en la Escritura, como para impedir que un verdadero hijo de Dios (o aquel que sinceramente Le busca) sea extraviado con deslumbrantes declaraciones de que “Cristo obedeció perfectamente la Ley (de Moisés) en lugar del pecador”. NOTA 3: Vemos que siempre los legalistas “se han burlado” (han sido adversarios o antagónicos) de los hijos de la promesa (aquellos que se salvan únicamente por la fe en la obra sacrificial del Hijo de Dios, sobre el madero): “Pero Sara vio que el hijo de Agar, la egipcia, el cual esta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac” (Ge.21:9). Ahora bien, aquellos que son “celosos” de la Ley dada a Israel en el monte Sinaí (Hch.20:20-21), y que enseñan a los hermanos: «Si no creéis que La Ley fue obedecida por Cristo en vuestro lugar, no podréis ser salvos” (Hch. 15:1), siempre tienen el mismo pobre argumento: “¿por la fe invalidáis la Ley? Pero la Divina respuesta es: “¡De ninguna manera! Más bien, confirmamos la Ley” (Ro. 3:31). Parece ser que muchos que se llaman cristianos no pueden entender esto. Y si las cosas básicas del Evangelio le son dura palabra, tiene uno que concluir que realmente “no conocen a Dios” (1 Co.15:34). NOTA 4: El único lugar donde Cristo ocupó el lugar del pecador arrepentido (que reconoce su impotencia para el bien. Aun para entender o buscar a Dios) fue en la cruz del Calvario. Allí, y sólo allí, Él cargó -de forma forense- con mi responsabilidad en cuanto a mi vieja naturaleza (a lo que yo soy en Adán): Sobre el madero, Él llevó dos cuestiones de suma importancia para la gloria del Padre, y para mi felicidad eterna. La primera de ellas la asumió en Su cuerpo (naturaleza humana, en Su primera venida). Quiso (aceptó) ser considerado por la Justicia Divina como poseyendo la naturaleza caída que yo recibí de Adán. En ese sentido, Él no fue “el segundo adán” sino “el último”. En Él, y en ese lugar, Dios terminó con Adán. Lo condenó (o maldijo) de una manera definitiva (Ro. 8:3; 6:7). Por eso se dice que “fue hecho pecado” (única y exclusivamente en la cruz, en aquellas 3 memorables y cruciales horas en que él permaneció colgado, en el Gólgota, fuera del campamento judío). Pero no dice -ni puede decir- que fue hecho pecador. Precisamente sobre la cruz es donde más vemos destellar Su santidad. La santidad de Su naturaleza como hombre. La segunda, es que entregó Su vida (aquella primera vida que tuvo tras Su nacimiento en este mundo, de una mujer), es decir: después de aquellas tres horas en que pendió de la cruz, murió (aunque en un acto de entrega voluntaria de la misma. No le fue arrebatada, sino que Él se despojó de ella, Jun.10:18; Lc. 23:46), como paga ante la Justicia Divina por los actos que yo había cometido con aquella naturaleza vieja, que recibí de mi padre Adán. Es por esto que los símbolos (no las realidades mismas) de mi redención se hallan en el hecho de comer pan y beber vino (reunido con otros que son de esta fe), como emblemas de Su cuerpo (naturaleza humana), y de su sangre (sacrificio cruento: derramamiento de la vida), en mi lugar. Es decir, del hecho de hacerlo con la mente (entendimiento) de estas cosas. Por eso han de discernirse (1 Co. 11:29) a la hora de conmemorar estos hechos maravillosos, por medio de estos símbolos, hasta que Él regrese a buscarme (1 Co. 11:26; Jn. 14:3). Si el Hijo hubiera tenido que obedecer primero la Ley de Moisés, en lugar mío, y así quitar de sobre mí la maldición que la Ley pronuncia sobre todos aquellos que -estando bajo ella- no la cumplen, ¿para qué tuvo que morir luego en mi lugar? Y, si al morir después de estar colgado en la cruz, allí me redimió, y quitó la maldición de la Ley -aunque yo no estaba bajo la Ley de Moisés, sino bajo la que Dios imprimió en mi corazón y conciencia, Ro. --2:12---15; 1 Co. --9:20---21- de sobre mí (Gá. 3:13), ¿de qué hubiera servido que antes hubiera obedecido esa Ley, en mi lugar?
Es como contradictorio muchas afirmaciones que hace. Si Dios es quien elige, como exigir al hombre que rechazo el mensaje si a fin de cuenta el hombre no puede elegir a Dios. Porque juzgarlo por algo que Dios sabe que el no puede hacer. Entonces la Salvación descansa en la oración y en la predicación. Juan 3:19 dice que la condenación reside no en la elección de Dios, sino que los hombres rechazaron a Cristo, así como el pueblo de Israel rechazo al mesías. Por otro lado, cuando en la Biblia se habla de elección no es para exclusión. La idea de Dios es que en Israel fuesen benditas todas las naciones de la tierra. Siempre que se habla de Cristo para salvación esta condicionado a creer, arrepentirse, recibir, confesar. Juan 1:7, 9. pero el necesita creer, no es automático. Ahora la acción del hombre de aceptar la salvación en Cristo no le da merito, porque es una acción de obediencia a lo que Dios ya estableció, y por otro lado, el hombre es sensibilizado para buscar a si creador por medio del E.S. pero el hombre puede rechazar o aceptar, es su decisión. Juan 1:7. Abraham la obediencia por fe, le fue contado por justicia.
minuto 21:00 "el que no esta conmigo esta contra mi" , para mi es demasiado improbable que un ser tan elevado tenga ese nivel de egolatría, para mi basta con tener una moral y una ética elevada e interés por que esos valores se conserven. No más miedo y creencias infundadas que adulan de amar al prójimo y odia y desprecia a cualquiera que piense diferente, la única prueba de su fe es su propia fe. eso es un argumento redondo, eso es una falacia argumentativa. deseo lo mejor para ustedes, y lo mejor también me sugiere recomendarles más honestidad, objetividad y racionalidad.
Estimado amigo : estas totalmente perdido, debes empezar por arrepentirte de tus pecados y acercarte a la cruz de Cristo en arrepentimiento y fe, asi el Espíritu Santo te guiará a toda verdad y comprenderás las Escrituras.
El que no está con Dios está contra Él..pero eso no anula la vida de las personas que están contra él,se supone que esto no es odio porque el que no está en Cristo está conforme con su vida pecaminosa y trata de loco a quien cree porque estos que creen "viven con sus vidas recortadas de los placeres que ellos si gozan"..para que quieres que se incluya dentro del reino de Dios a gente que no quiere?acaso algún creyente odia al que no cree,???
“Estoy asombrado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. “No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren alterar el evangelio de Cristo. “ “Pero si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anuncia un evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. “ “Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguien os predica un evangelio diferente del que habéis recibido, sea anatema” (Gá.1:6-9).
EL EVANGELIO DIFERENTE
Hay muchos que dicen (y creen) que para salvarse son necesarios dos requisitos: obedecer la Ley de Moisés, y creer en Cristo. Algunas denominaciones intercambian el orden de estas dos suposiciones. Así, algunas dicen, “para ser salvo es necesario creer en Cristo, como tu Salvador personal, y después obedecer la Ley, en agradecimiento a Dios, y prueba de que eres salvo”. Tal amalgama (que no verdadera fusión o soldadura) es totalmente imposible. La Ley (de Moisés) y la gracia de Jesucristo están construidas sobre bases diferentes. Están en distinto terreno. Lo que pertenece a la una, no sólo no está en la otra, sino que están en antagonismo. La Ley está apoyada en una base (o cimientos) que lo único que permite construir encima es la propia justicia (Fil.3:9); y la fe, en otra, que da acceso a la justicia (y justificación) que Dios ofrece gratuitamente al pecador. Ambas bases son independientes (no contactan entre sí), y son mutuamente excluyentes. Por eso, Pablo dice, en Ro. 3: 21-31: Pero ahora, aparte de la Ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la Ley y por los Profetas: “la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, “para todos los que creen en él, porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios, “y son justificados gratuitamente por su gracia [la gracia de Dios no es meramente la generosidad que Él tiene de darnos cosas “gratis”, es decir, que no merecemos. Tampoco es únicamente la cualidad bondadosa o compasiva de perdonar nuestras ofensas a Él: es el atributo divino que favorece a los ofensores o enemigos: aquellos que estaban combatiendo en las filas contrarias a Él. Y que todo cuento hacían-desde respirar, a comer o dormir- era oponerse a Su gloria], “mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación “por medio de la fe en su sangre [la redención es la compra de un esclavo, con el fin de libertarlo, o adquirirlo para emplearlo en la propia hacienda, donde gozará de mejores privilegios] “para manifestar su justicia [tanto retributiva, como justificadora], a causa de haber pasado por alto, en su paciencia [no en Su justicia], los pecados pasados, con miras a manifestar en este tiempo su justicia [ahora sí, desde la cruz de Cristo, Su justicia quedó claramente evidenciada a hombres y ángeles], a fin de que él sea el justo y el que justifica al que es de la fe de Jesús. “¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras [como la de Moisés]? No, sino por la ley de la fe. [Por eso, es completamente ridículo decir que Cristo vino a “obedecer la Ley. Y menos, en lugar de los elegidos. Él nunca obtendría nada para ellos, por esta vía]. “Concluimos, pues, que el hombre es justificado [y también redimido y santificado, 1 Co. 1:30] por la fe sin las obras de la Ley. [¿Puede apreciarse con claridad la herejía de los reformados y los teólogos del Pacto y sus seguidores, que postulan que “Cristo vino a obedecer perfectamente la Ley por ellos?”]. “¿Es Dios solamente Dios de los judíos? ¿No es también Dios de los gentiles? Ciertamente, también de los gentiles, porque Dios es uno, y él justificará por la fe a los de la circuncisión, y por medio de la fe a los de la incircuncisión. [Esto viene a demostrar, y reforzar la idea de que la justificación no tiene nada que ver con la Ley. De otro modo, los gentiles quedarían totalmente excluidos de beneficiarse del supuesto de que Cristo obedeciese la Ley en lugar de ellos, puesto que los gentiles nunca estuvieron bajo la Ley de Moisés, Ro. 2:12; 1 Co. 9:21a. Ef. 2:12 dice de los gentiles que, antes de iniciarse la Iglesia, y su inclusión en Ella, estaban “alejados de la ciudadanía de Israel”. Recordemos que en la Iglesia están entrando tanto judíos como no judíos (gentiles), formando el tercer grupo de la división tripartita que Dios hace de la humanidad, 1 Co. 10:32. Y, la manera de alcanzar esa ciudadanía era la circuncisión y la observancia de la Ley de Moisés, Gá. 5:3]. “Luego, ¿por la fe invalidamos la Ley? ¡De ninguna manera! Más bien, confirmamos la Ley [no porque ésta pueda salvar, o agradar a Dios, sino porque hacía necesaria la fe, para alcanzar la salvación, y la vida de gratitud/alabanza a Dios, por Su don inefable, Ro. 1:17]”. Los teólogos del Pacto, y los reformados en general, confunden Israel (y su llamado, posición, demandas y privilegios), con la Iglesia (y los suyos). Por eso, dan un énfasis a los pactos que Dios hizo con la humanidad, indebida, para hacerse “encajar” en alguno de ellos (hasta se inventan un pacto entre Dios el Padre, y Dios el Hijo, antes de existir el universo); y una prominencia a la Ley de Moisés completamente herética (ellos piensan que Israel ha sido desechado definitivamente por Dios, y por tanto, que ellos han reemplazado a Israel. Leen Ro.11:2, por ejemplo, pero cierran sus oídos para no entender, y sus ojos, para no ver). Así, los legalistas (de cualquier época y denominación religiosa), siempre se colocan en el centro (ese es el íntimo -en inconfesable- motivo de su obsesión con guardar la Ley: la necesidad irreductible de lograr “la justicia propia”, Fil. 3:9. La carne siempre es irreductible: ni siquiera Dios la mejora, o la cambia: sencillamente, la condena, Ro. 8:3). Y “tirando de ese hilo”, ellos llegan a la deducción (o conclusión) de que Cristo debió obedecer (perfectamente) la Ley de Moisés durante Su vida, a favor de ellos. De otro modo -según creen- no podrían ser salvos. Y, así, tuercen las Escrituras para que digan lo que no dicen (y es imposible que digan).
POR QUÉ CRISTO NO OBEDECIO LA LEY, Y ¿QUÉ IMPLICARÍA SI LO HUBIESE HECHO? He.5:8 dice de Cristo que, “aunque era Hijo, a través del sufrimiento aprendió lo que es la obediencia” (RVR95). “Así que Cristo, a pesar de ser Hijo, por lo que sufrió aprendió a obedecer” (DHH). Si Cristo necesitó toda Su vida para aprender la obediencia a Dios (estando en la condición de hombre), ¿Cómo es que dicen algunos que obedeció perfectamente la Ley en lugar de ellos, para salvarlos? Y si fue así, ¿en qué momento lo hizo? No olvidemos que, hasta después de Su obra en la Cruz, y Su resurrección, la Ley de Moisés estuvo vigente para Israel en todos sus capítulos. ¿Dónde dicen las Escrituras que Cristo obedeció esa Ley, en todos sus términos (porque, si solamente hubiera dejado de obedecer uno de ellos, hubiera sido culpado de todos, Lv.4:22; Gá?5:3; Stg. 2:10)? ¿Diezmaba? ¿Presentaba ofrendas? ¿Hacía sacrificios?, etc. Sin embargo, las Escrituras dicen que Le llevó toda una vida en la tierra para aprender la obediencia. Las Escrituras dan testimonio de que Él no nació “perfecto”, sino que precisó del proceso de la vida humana (una existencia corporal y social) que le proporcionase el aprendizaje necesario para ser perfeccionado. No sólo en los primeros años de ella, como puede verse en Lc. 2:51-52, donde dice que teniendo Jesús 12 años, “descendió con ellos [sus padres] y volvió a Nazaret, y les estaba sujeto…. Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia para con Dios y los hombres”, sino de todo el tiempo que vivió entre nosotros. Eso podemos deducirlo del tipo de vida que llevó. De los eventos dolorosos, decepcionantes y traumáticos por los que pasó, durante toda Su vida (tanto fuera como dentro del círculo de los Suyos), hasta el momento de Su regreso al cielo. Y, hasta ese momento, estuvo en la escuela de Dios en esta vida y en esta tierra, aprendiendo la obediencia. Así, también las Escrituras dicen en He. 2:10 que “convenía a aquel por cuya causa existen todas las cosas y por quien todas las cosas subsisten que, habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionara por medio de las aflicciones al autor de la salvación de ellos” (RVR95). Y en otra versión: “Todas las cosas existen para Dios y por la acción de Dios, que quiere que todos sus hijos tengan parte en su gloria. Por eso, Dios, por medio del sufrimiento, tenía que hacer perfecto a Jesucristo, el Salvador de ellos” (DHH). Entonces, si Jesús no fue perfecto (en cuanto a la obediencia) hasta el momento de Su partida de esta tierra, ¿Cómo dicen algunos que, durante Su vida, obedeció “perfectamente” la Ley, en lugar de ellos, para así salvarlos? Ahora, la cuestión puede verse también desde otro ángulo. Si Cristo obedeció (durante el trascurso de Su vida en la tierra) perfectamente la Ley en mi lugar, entonces, a efectos legales (en lo tocante a la justicia Divina), se me imputó a mí mismo esa obediencia. Es como si yo mismo la hubiera obedecido. ¿No es eso lo que quiere decir “en mi lugar”? De lo anterior, se suscitan dos cuestiones difíciles para los que abogan por esa teoría “teológica” (sé que es duro decir “infernal”, pero es lo que es: un artificio diabólico): 1ª) Si yo obedecí la Ley de Moisés (aunque yo no soy judío ni israelita, y nunca estuve bajo esa Ley), la Ley -una vez obedecida- ya no podía maldecirme, y en ese caso yo mismo (en mi Sustituto) obtuve la vida. Porque las Escrituras dicen al respecto: “Moisés escribe así de la justicia que es por la Ley: el hombre que haga estas cosas vivirá por ellas” (Ro. 10:5). Y, en Gá.3:12, dicen: “Pero la Ley no procede de la fe, sino que dice “El que haga estas cosas vivirá por ellas”. 2ª) Y si lo anterior fuese cierto: que Jesucristo obedeció perfectamente la Ley en lugar de ellos, y por tanto los libró de la maldición que ella trae sobre los que no la obedecen, y así mismo les obtuvo la vida (como vimos anteriormente), ¿Cómo es que éstos también dicen que Jesucristo tuvo que morir en la cruz para cumplir la justicia “del Padre”? Ellos dicen que Cristo obedeció perfectamente la Ley durante toda Su vida. Y que eso lo hizo en lugar de ellos mismos. De ahí se deduce que la maldición de Dios a los que la desobedezcan, fue quitada de sobre ellos (o, mejor dicho, nunca estuvieron bajo ella, porque nacieron muchos años después de que Cristo la hubiese obedecido en lugar de ellos). No obstante, afirman que Cristo fue a la cruz ¡¡para satisfacer la justicia que “el Padre” demandaba de los infractores de la Ley!! (¡Sin palabras, ante semejante incoherencia y despropósito!!!). NOTA 1: Esta última afirmación tampoco es bíblica, porque Cristo se ofreció al Padre, sí, pero no para cumplir la justicia del Padre, sino la de Dios, siendo Él, y el Espíritu Santo, también Dios. NOTA 2: “La Ley no procede de la fe”. No sé cómo explicarán esto los legalistas, entre los cuales están los teólogos del Pacto, y sus seguidores: Si Jesús Se pasó toda Su vida obedeciendo “perfectamente” la Ley… ¿estaba actuando con fe? (cifr. He.12:2; Ap. 14:12). Y si a mí mismo se me imputa la obediencia (perfecta) a esa Ley, en la Persona de mi Representante legal, entonces es claro que se me imputan obras, y no fe (cifr. Ro. 11:6). ¿Cómo se armoniza eso con la afirmación de las Escrituras de que “sin fe es imposible agradar a Dios” (He. 11:6)? Los predicadores de la teología del Pacto saben muy bien que la fe es imprescindible para obtener la salvación (Ro.1:17-18; 3:22, 25, etc.). El propio apóstol Pablo, decía esto de sí mismo: “Pero cuantas cosas eran para mí ganancia (entre esas cosas, estaba la obediencia a Ley de Moisés), las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida (esa convicción continuaba estando en él, aun siendo ya cristiano, y apóstol comisionado directamente por Jesucristo) por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor. “Por amor a él lo he perdido todo (cualquier justicia que él hubiera podido, tal vez, lograr con sus obediencias, renuncias, sacrificios, etc.) y lo tengo por basura, para ganar a Cristo y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que se basa en la Ley, sino la que se adquiere por la fe en Cristo, la justicia que procede de Dios y se basa en la fe” (Fil. 3:7-9). Dice Pablo que “la propia justicia” se basa en la Ley. ¿Qué buscan estos teólogos del Pacto -y sus seguidores- cuando se quieren amparar bajo el paraguas de la Ley de Moisés (en este caso, obedecida en lugar de ellos por Otro)? ¿Por qué están tan interesados en obedecer la Ley, al punto que le hacen decir a las Escrituras que -como ellos son pecadores, y Cristo vino a salvarles- Él se encargó de obedecer la Ley en lugar de ellos (cosa que ni remotamente dicen)? ¿A quién pretenden impresionar? Cuando el ojo de alguien está enfermo, le dificulta (o le impide por completo) la visión. No conocen cabalmente a Jesucristo y, en consecuencia, no distinguen con nitidez entre Israel y la Iglesia. “Pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas [todo tu conocimiento, todas tus doctrinas, estarán afectadas por “esa levadura” que hace fermentar la buena masa que leen en sus Biblias, volviéndolas confusas, distorsionadas]. Así que, si la luz que hay en ti es tinieblas, ¿Cuántas no serán las mismas tinieblas?” (Mt. 6:23). Y, donde hay confusión y tinieblas, allí Satanás hace su obra. Bien dice el Señor que “un poco de levadura, leuda toda la masa” (1 Co.5:6; Gá. 5:9). Esa levadura: la compulsión religiosa, que siempre tiene pretensiones “farisaicas” de cumplir la Ley (o cualquier otro código de moral y/o conducta), deriva en una confusión (mezcla) entre la Ley y la gracia, que les conduce a tener una cosmovisión errada de los planes de Dios, y de Su Evangelio. Y no sólo hay serios errores en su teología, sino que hay absurdos y herejías (apartamientos graves de la verdad y del Evangelio). Estos, aun leyendo y predicando frecuentemente sobre aquella arrogancia que envolvía a los cristianos en Roma, cuando pensaban que Israel estaba ya obsoleto, y que ellos habían venido a sustituirles, o continuarles en una versión mejorada, participan de la misma arrogancia. Esta arrogancia que los asediaba, consistía en creer que Israel había fracasado de forma definitiva y que, por tanto, Dios los desechó para siempre. Y, que ellos, habían venido para sustituir o bien continuar a Israel en otra posición más privilegiada. En otras palabras, se creían la última coca cola en el desierto. Y al Israel étnico, y nacional, lo tiraban al cubo de la basura (Ro.11:24). Pero Dios, después de señalar (recordándoles) que llamó a Israel, y le dio dones y promesas (casi todas ellas aún sin cumplir), les dice a aquellos y a éstos “arrogantes”: “irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios” (Ro.11:29). ¿Qué hay en sus mentes, que no pueden entender esto?
No especifica a profundidad sobre la justificación por la FE en JESÚS, o la justicia de DIOS por la FE en JESÚS, romanos 5- 19, somos la justos por la obediencia de JESÚS!!!!!, no somos justos por nuestra propia obediencia, romanos 1- 17 Pablo dice que en el evangelio la justicia de DIOS se revela al hombre por FE, la justicia de DIOS es revelada al hombre , de esta forma el hombre tiene revelación de la justicia de DIOS 2da corintios 5- 21, JESÚS fue hecho pecado, para que nosotros fuésemos hechos justos o justicia de DIOS, nosotros somos la justicia de DIOS!!!!, Cuando JESÚS dice más buscad primeramente el reino de DIOS y su justicia, osea buscad la justicia de DIOS, nosotros somos la justicia de DIOS!!!!, somos la voz de DIOS, no vamos a decir que comeré?, que vestiré?, no!!!, de ninguna manera! el pecador dice así, es normal, porque es pecador, se guía por las apariencias, es su mentalidad, nosotros no!!! somos la justicia de DIOS!!!, Somos justos!!! , no vamos a decir que comeré?, No sino vamos a decir!!! : Tengo para comer!!, No me falta nada!! soy bendecido, !!! cuando trabajo, trabajo con esa mentalidad trabajo reposado, trabajo en paz!!, El pecador, trabaja preocupado, este varón no edifica nada! no es caliente con el tema de la justicia de DIOS
Amigo Hector: debetias escuchar y ver toda la serie de Romanos y con la iluminación del Espiritu Santo, escudriñar con humildad las escrituras, antes de emitir esos juicios sobre este varón de Dios.
Cuanta misericordia! !! No merezco ni siquiera estar escuchando este mensaje!!! Gracias Señor por pagar nuestras culpas en la cruz!! Quiero saber más y más de Jesús! ! Que bendición nos alcanza Dios día a día sin merecerlo! ! Toda la gloria es para el!!
Dios continue bendiciendo a nuestro hermano pastor Sugel Michelen, y le de mucha salud y sabiduria para continuar ensenandonos.
Un poco poco de
Tremenda palabra gracias a Dios por su vida pastor Sugel, bendigo su vida y la de su familia que Dios siga dando sabiduría y revelación a su vida y sobre todo temor de Dios en su corazón bendiciones
Doy gracias a Dios por la vida del Pastor Sugel, sus enseñanzas biblicas a traves de predicaciones expositivas, han sido de gran bendición y crecimiento espiritual.
Tremendo mensaje, usted explica la palabra correctamente
Que bello Evangelio Eterno le doy Gloria y Honra al Dueño del Evangelio de vida Eterna al único Dios Todopoderoso de toda Gracia al eterno amoroso Dios de Amor Jesucristo 😘 Aleluya 🙌 Gloria y honra al Eterno Dios vivo Jesucristo 😇 estoy loco cada dia por mi bello Jesús Gran milagro hizo en Mi 😘😘😘 como no seguirlo hasta verle cara a cara a mi Creador Jesucristo 😇 😘
No se si es la misma que le había enviado pero no me voy a poder comprar Nda perdón por la demora en la respuesta pero no pude ir a la clase de ayer y no pude 77777777777777777777777777777777777777777777777777777777777777777777i
Esto si se le llama palabra de Dios. Un saludo para sugel Michelén por disponerse a predicar lo que es verdadero en Dios sin adulterar la palabra
Gracias SEÑOR por tu Santa y Bendita palabra. Dios lo bendiga pastor Sugel Michelen y lo siga usando grandemente.
Gracias a Jesucristo Salvador los permitio un dia mas de vida a todo serhumano a pesar de nuestros pecados y faltas que come temos en el diario de la Vida saludos todos hermanos y hermanas de la .IBSJ 🙏 🙏
Toda la gloria sea Dada a Dios por su Palabra!!!
Dios lo bendiga y un abrazo desde Uruguay 🇺🇾🇺🇾🇺🇾
La predicación expositiva es en mi opinión el mejor método de predica y estudio biblico. Gracias Dios mio por todos estos recursos que tenemos a la mano. Dios bendiga este ministerio. 🙏
Oh tremenda palabra ayúdanos señor abrenos nuestros ojos para ver tus maravillas Amén Amén Amén
Dios lo bendiga siempre hermano Michelen..Dios le da sabiduría para explicar tan claramente el amor y perdón de Dios...
Bendito sea el Señor por permitirnos cada día conocer más de el a través de su palabra y de predicaciones cómo está, gracias amado hermano y Pasto suchel,,que el Señor me muestre siempre a la luz de la escritura que solo en el hay salvación , y muy claro algo que usted dijo fervor sin conocimiento es igual a fanatisco, por eso mi anhelo es conocer a Jesucristo,gracias por cada una de sus palabras en esta prédica , Dios le bendiga
Directo al corazón Dios lo bendiga pastor Sugel
Hoy dios tu me giaras tu me iluminaras tu me purificarlas en nombre de tu hijo Jesús gloria a dios amen
GLORIA a DIOS y bendiciones por la palabra que nuestro señor siga bendiciendo su vida y su caminar con el y ayudándonos a ver las maravillas de el BENDITO SEA DIOS
Gracias señor porque tú has enviado tu palabra y exhortada por este pastor no adulterada
Favorecidos por gracia de Dios, alabado es por siempre Jesús
Gloria a Dios por Su palabra!! Bendice a tu siervos y su ministerio , Señor.
La fe viene de .Jesucristo Salvador con todo su poder .Gloria Dios 🙏 🙏 🙏
Amen Gloria a Dios 🙌
Que lindo mensaje y gracias pastor Sugel Michelén
Reenviaré 👍 Dios los bendiga 🙏 Saludos desde 🇲🇽
Excelente mensaje. Gloria a Dios🙏🙏
Alabado sea eternamente el Santo nombre del Señor JESUCRISTO,
Excelente mensaje
A DIOS Gracias por este barón que está parado en la brecha.
DIOS le fortalezca el ministerio que le ha sido dado, N L Santo nombre de JESÚS.!
Extraordinaria Exaltacion al extraordinario Amor del Padre por todas sus criaturas. Regalo en este tiempo de Confusión. LUZ RESPLANDECE 🙏💕
Tremenda palabra!!!
Gloria a.Dios y nuestro.señor Jesucristo.
Gracias señor por usar a este siervo suyon.
Escuchar esta predica me conmueve mucho mi corazón, gracias a Dios por usar la vida del pastor Sugel
Dios todopoderoso, gracias por tanta misericordia.
Exelente exposición de la palabra, Dios siga llenando su vida de mucha sabiduría, ha Sido muy edificante esta serie de romanos. Dios le bendiga
Puffffff reverenda palabra, muchas bendiciones y gracias
Muy bien detallada la palabra bendiciones
DIOS BENDIGA SU VIDA & MINISTERIO PASTOR...GRACIAS POR LA PALABRA ES DE MUCHA BENDICIÓN SUS ENSEÑANZAS..
MIS SALUDOS DESDE ARGENTINA.
Gracias Padre, por tu misericordia por medio de nuestro señor Jesucristo.
Dios lo bendiga y lo siga usando y guardando como hasta hoy. 🙏
Solo oro, y reclamo según el versículo, cree en Jesús y serás.......
Amén y amén 🙏🙏
Exelente mensaje he quedado sin palabras .
Past. Sugel, io sto escuchando il messaggio probablemente 3 años después. He puso stop al minuto 10....
La elección es per Gracia.
La Salvación es condiciónada....
Entonces, eres tú past. Sugel, arminiano?
He escuchado la clase de armininians y mi párese que encaja plenamente tu visión con la mía.
Yo soy arminiano, como Ravenhill, Weasley, Whitefield ma tu?
Aún, muy querido past. tu dices que professes la confesión de Londres a mi parece el contrario.
p.s. "Querido Past" no es una burla. Lo pienso de verdad. Estoy muy agradecido a DIOS por usted. Me encanta como esplicas La Escritura. Escucho sus sermones mayor tiempo en mi trabajo.
DIOS lo bendiga mucho.
Con afecto.
aunque no entrndi bien el mesaje sobre el escandalo de la cruz pero fue un tremendo mensaje entendi mucha cosa inportante que DIOS LE BENDIJA GRANDEMENTE sugel y que la paz de DIOS SEA CONTIGO Y CON TU CASA
Es sencillo, cuando el dijo que personas que quieren vivir su propia vida y si les hablas el mensaje de la cruz no quieren oírlo pq la Palabra de Dios desnuda al pecador y se ESCANDALIZAN piensan que vivir como dice Dios es un cuento de los que verdaderamente Creen en el EVANGELIO, Dtbg Todo el Camino 🙏🏿
Osea el mensaje de la Cruz es Locura para los que se pierden como quien diría es un escándalo 🤷🏿♂️para los que no creen a CRISTO
Gloria a cristo ...Dios siga bendiciendo a sujel y lo siga usando para su gloria
Gloria a Dios por su Palabra Santa. Expursta de una manera clara.
Amén Amén Y Amén
Quebrantada completamente..gloria a Dios!!!
Hermosa reunión muy linda predicación.
Hermoso y dulce evangelio.. que es manifestado a los de corazón pobre y miserables a través de la cruz de Jesús.. gracias
Dios lo siga bendiciendo por la sabiduria quel el senor le a dado glori a Dios
Amén ✝️
Sinceramente hubiese más de estas prédicas en nuestros sitios donde nos reunimos a escuchar palabra de Dios la gente que sigue sinceramente a Dios estaríamos transformando a muchas personas
Totalmente de acuerdo
Son contados los pastores que predican el verdadero evangelio. A las iglesias que iba ninguna prédica la sana doctrina
Y desde que estoy escuchando estás enseñanzas Dios me abrió el entendimiento que andaba en iglesias falsas
Dios envíe pastores que hablen de la verdad .y no del bienestar material y bendiciones solo aquí en la tierra porque en eso reducen el evangelio
Gloria a Dios 🙌🏻
Gloria a Dios que bendición 🙏
Saludos desde Perú.
GLORIA A DIOS POR LA JUSTICIA DE DIOS ! ES UNA JUSTICIA QUE PROVIENE DE LA FE. ! PORQUE EL FIN DE LA LEY ES CRISTO, PARA JUSTICIA A TODO AQUEL QUE CREE, ES DECIR , CRISTO VINO PARA CUMPLIR LA LEY ( Mt. 5: 17 ) A FIN DE TERMINARLA Y REEMPLAZARLA ( Mt. 8: 3-4 ). POR LO TANTO, TODO AQUEL QUE CREE EN CRISTO RECIBE LA JUSTICIA DE DIOS, LA CUAL ES CRISTO MISMO. SENCILLO ! EL QUE CREE RECIBE ! LLEGA A SER JUSTO SENCILLAMENTE POR CREER, PROVIENE DE LA FE. ABRAHAM LE CREYÓ A DIOS Y LE FUE CONTADO POR JUSTICIA, DIOS LO JUSTIFICO EN EL ACTO. !
P
T
Dios le bendiga
QUE IMPORTANTE, CIERTO, Y VERAZ ESTE MENSAJE. EXCELENTE MAESTRO.
Porque no recitan el padre nuestro uds si se puede saber
Gracias x hermosas palabras son aliento de Vida 🙏🙏
Amén
ALELUYA 🥰🥰
Cristo es la consumación de la ley : " TODO SE HA CONSUMADO "...
Gracias....!
AMÉN🙏❤🙏AMÉN
Claro como el agua. Amén
El que crea en él no sera avergonzado :)
Aleluya
Amen
Efesios 2:8-9 bien explicado con romanos 💜👌🤩
Pastor sugel porfavor nondejr de orar por mi famila Oliva Gutierrez Hemos sentido ya hace tiempo el viajar a su pais y pertenecer a su iglesia
Excelente mensaje aclarativo de la Gracia pastor Sugel, solo una observacion; su oracion inicial min 1:00 no coincide al orden cronologico de los hechos que han de suceder en los dias del arrebatamiento de la iglesia(los santos).
Primero, arrebatara a Su iglesia.
Segundo, descendera del cielo despues de los 7siete años de la gran tribulacion.
Que mis palabras no sean piedra de tropiezo para nadie, pues no son mias, sino Del Señor.
Bendiciones iglesia🙏
Saludos. El Pastor Sugel no es dispensacionalista . Paz
Bendiciones y afectos desde venezuela.Donde está ubicada la iglesia?
República Dominicana
❤️❤️🙏🙏🇨🇴🇨🇴
Esta bien
Cómo puedo diferenciar el fervor del fanatismo?
El fanatismo es el accionar que surge en busca del mérito o justicia propia, mientras el fervor es el accionar que surge del agradecimiento de lo hecho por Dios en nuestro Señor Jesucristo.
Hola amado Sugel, mi marido no pretende llegar al cielo por obras, bueno fuera. El cree que Dios lo va a juzgar conforme él (mi marido), cree. O sea, que todo está bien, que no me preocupe.
Es cierto que cuando se enfatiza en un versículo mas que en otros, caricaturiza la verdad biblica, esto mismo pasa cuando se estudia la forma de orar segun la biblia, donde al hacer enfasis exagerado en el verso donde dice, supuestamente, que no se debe repetir oraciones, se entra a deformar toda la verdad bíblica sobre este tema. Pues en otros pasajes biblicos encontramos a Jesucristo repitiendo oraciones, tambien nos enseña una oración, el padre nuestro, para que lo repitamos. Entonces, se concluye que ese enfasis exagerado ha distorsionado la verdadera enseñanza biblica sobre la oración.
CONSIDERACIONES BÁSICAS (1)
EL PROPÓSITO DE LA LEY:
Desde el principio, Dios escogió a Abraham [con Isaac y Jacob (Israel), que es la línea genética según Su promesa a aquel, puesto que Abraham tuvo más hijos) para bendecirlo, y como medio de bendición al resto de la humanidad (los gentiles). (Gn.12:2-3; 28:14; Hch.3:25).
Eso no lo hizo por medio de un pacto, puesto que no dice, “si haces esto, Yo haré lo otro”, o bien “éste será Mi compromiso contigo, si tú cumples estos requisitos”; sino que Dios en Su soberanía escoge a Abraham y le da una promesa, Ro. 4:13; 9:8; Gá. 3:29; 4:23,
De esa forma, puede decirse que Israel ha actuado como un “plan piloto” de Dios, para la humanidad. Eso lo enseñan las Escrituras muchas veces, cuando dicen que ellos son Sus testigos escogidos con la finalidad de que el resto de las naciones (algo que sólo existe en la tierra) Lo conozcan (entiendan algo de Su carácter, y Sus procederes), y Lo glorifiquen (alaben, adoren, bendigan, honren, etc.).
Esa es la explicación de las frases bíblicas donde dice “al judío, primeramente, y después al griego” (Hch. 3:26; 13:14; Ro. 1:16, etc.).
NOTA 1: La Ley (que formaría parte de lo que las Escrituras a veces llaman “pacto”), vino 430 años después de la promesa (Gá. 3:17).
La función predominante de la Ley dada a Israel por medio de Moisés es para que la humanidad entera (Israel, y el resto de la humanidad) entienda que Dios tiene unos requerimientos universales sobre todo ser humano. De ahí se derivan las otras funciones de la Ley (exceptuando los capítulos que tratan de los rituales, sacrificios y ofrendas, los cuales introducen -rudimentariamente- la noción del perdón, por medio de “la sangre” y “la ofrenda” de algo extremadamente puro y de valor para Dios).
Él, como Creador del universo, y Autor de la vida, tiene Sus principios. Éstos son normativos para toda criatura (en toda cultura, época y nación).
Para darlos a conocer de manera explícita (a la humanidad), Dios dio a Israel una ley escrita, aunque en tablas de piedra, lo cual representa -al menos- dos cosas: a) que esas normas o mandamientos, que debían estar sensibles/activos en el corazón de los hombres, tuvieron que llegar a ser algo externo al ahombre mismo: con el devenir de la historia Dios hubo de dárselas (recordárselas) en un soporte fuera del hombre (para que tuviera referencias objetivas del “Manual de funcionamiento” de las relaciones interpersonales humanas, y con el propio Dios), y b) la dureza del corazón humano, al que figuradamente esas tablas de piedra representan (Ez. 11:19; 36:26; 2 Co. 3:3).
Así que la Ley formal que Dios dio a Israel, por medio de Moisés, no tiene nunca como propósito calificar a alguien como “aceptable” a Dios (puesto que eso es imposible, Ro. 8:3). Ni siquiera al Señor Jesucristo (si la hubiera obedecido) lo hubiera calificado como “perfecto/adecuado” para el sacrificio y la ofrenda que iba a hacer de Sí mismo.
La Ley mosaica, en la parte que llamamos Decálogo (o Ley moral) viene a ser un código de conducta básico, rudimentario (por cuanto contiene nociones poco profundas respecto al carácter de Dios y Sus requerimientos al hombre, del Cual él es imagen y semejanza), y preliminar o preparatorio para la fe que vendría después, Gá. 3:23; 4:3, 9; Col. 2:20; He. 5:12; 6:1; 8:5, etc.).
NOTA 2: De los 10 preceptos de esa parte de la Ley sinaítica, sólo 2 están formulados en forma positiva. Los otros 8 son prohibiciones; lo cual denota que son “luces rojas” que el hombre no debía traspasar. Eso evidencia estar tratando con una naturaleza impotente y corrupta (no ya que no fuera capaz de hacer el bien, sino que de ningún modo podía refrenarse del mal), cosa que el Señor Jesucristo nunca tuvo. Ni siquiera sobre la cruz, donde legalmente fue “hecho” (considerado, tenido) como pecado; no como pecador.
LA INCONGRUENCIA Y LA FALACIA DEL “EVANGELIO” QUE ENSEÑA QUE CRISTO OBEDECIÓ LA LEY POR EL PECADOR:
Si el Señor Jesucristo se hubiera colocado bajo la ley, con la finalidad de obedecerla, aunque solo fuese en representación del pecador elegido, se hubiera puesto en el brete de afirmar con ello tener una naturaleza pecadora, que precisaba “frenos” para evitar caer en aquellas cosas superficiales que desagradan a Dios, pues allí son vistas de un modo rudimentario y sin calado, Mt.5:21-43).
Si Él hubiera hecho tal cosa, durante Su vida, hubiera simulado ser carnal, impuro, y en tal caso se hubiera hallado engaño en Él (1 P. 2:22), pues la Ley no fue dada para el justo, sino para los transgresores y desobedientes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, para los fornicarios, para los sodomitas, para los secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a la sana doctrina” (1 Ti. 1:9-10).
Haberse colocado bajo esa Ley, con el fin de obedecerla en lugar de los pecadores a quienes vino a salvar, hubiera denotado que a ellos les hacía falta la justica “que es por la le” (la ley de las obras). Y eso es una contradicción flagrante del Evangelio, pues el Evangelio dice:
“¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras? No, sino por la ley de la fe. Concluimos, pues, que el hombre es justificado por la fe sin las obras de la Ley” (Ro. 3:27-28).
Y es que el Evangelio, merced a que siempre fue atacado por los legalistas, está ampliamente desarrollado en la Escritura, como para impedir que un verdadero hijo de Dios (o aquel que sinceramente Le busca) sea extraviado con deslumbrantes declaraciones de que “Cristo obedeció perfectamente la Ley (de Moisés) en lugar del pecador”.
NOTA 3: Vemos que siempre los legalistas “se han burlado” (han sido adversarios o antagónicos) de los hijos de la promesa (aquellos que se salvan únicamente por la fe en la obra sacrificial del Hijo de Dios, sobre el madero): “Pero Sara vio que el hijo de Agar, la egipcia, el cual esta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac” (Ge.21:9).
Ahora bien, aquellos que son “celosos” de la Ley dada a Israel en el monte Sinaí (Hch.20:20-21), y que enseñan a los hermanos: «Si no creéis que La Ley fue obedecida por Cristo en vuestro lugar, no podréis ser salvos” (Hch. 15:1), siempre tienen el mismo pobre argumento: “¿por la fe invalidáis la Ley? Pero la Divina respuesta es: “¡De ninguna manera! Más bien, confirmamos la Ley” (Ro. 3:31).
Parece ser que muchos que se llaman cristianos no pueden entender esto. Y si las cosas básicas del Evangelio le son dura palabra, tiene uno que concluir que realmente “no conocen a Dios” (1 Co.15:34).
NOTA 4: El único lugar donde Cristo ocupó el lugar del pecador arrepentido (que reconoce su impotencia para el bien. Aun para entender o buscar a Dios) fue en la cruz del Calvario. Allí, y sólo allí, Él cargó -de forma forense- con mi responsabilidad en cuanto a mi vieja naturaleza (a lo que yo soy en Adán): Sobre el madero, Él llevó dos cuestiones de suma importancia para la gloria del Padre, y para mi felicidad eterna.
La primera de ellas la asumió en Su cuerpo (naturaleza humana, en Su primera venida). Quiso (aceptó) ser considerado por la Justicia Divina como poseyendo la naturaleza caída que yo recibí de Adán. En ese sentido, Él no fue “el segundo adán” sino “el último”. En Él, y en ese lugar, Dios terminó con Adán. Lo condenó (o maldijo) de una manera definitiva (Ro. 8:3; 6:7). Por eso se dice que “fue hecho pecado” (única y exclusivamente en la cruz, en aquellas 3 memorables y cruciales horas en que él permaneció colgado, en el Gólgota, fuera del campamento judío).
Pero no dice -ni puede decir- que fue hecho pecador. Precisamente sobre la cruz es donde más vemos destellar Su santidad. La santidad de Su naturaleza como hombre.
La segunda, es que entregó Su vida (aquella primera vida que tuvo tras Su nacimiento en este mundo, de una mujer), es decir: después de aquellas tres horas en que pendió de la cruz, murió (aunque en un acto de entrega voluntaria de la misma. No le fue arrebatada, sino que Él se despojó de ella, Jun.10:18; Lc. 23:46), como paga ante la Justicia Divina por los actos que yo había cometido con aquella naturaleza vieja, que recibí de mi padre Adán.
Es por esto que los símbolos (no las realidades mismas) de mi redención se hallan en el hecho de comer pan y beber vino (reunido con otros que son de esta fe), como emblemas de Su cuerpo (naturaleza humana), y de su sangre (sacrificio cruento: derramamiento de la vida), en mi lugar.
Es decir, del hecho de hacerlo con la mente (entendimiento) de estas cosas. Por eso han de discernirse (1 Co. 11:29) a la hora de conmemorar estos hechos maravillosos, por medio de estos símbolos, hasta que Él regrese a buscarme (1 Co. 11:26; Jn. 14:3).
Si el Hijo hubiera tenido que obedecer primero la Ley de Moisés, en lugar mío, y así quitar de sobre mí la maldición que la Ley pronuncia sobre todos aquellos que -estando bajo ella- no la cumplen, ¿para qué tuvo que morir luego en mi lugar?
Y, si al morir después de estar colgado en la cruz, allí me redimió, y quitó la maldición de la Ley -aunque yo no estaba bajo la Ley de Moisés, sino bajo la que Dios imprimió en mi corazón y conciencia, Ro. --2:12---15; 1 Co. --9:20---21- de sobre mí (Gá. 3:13), ¿de qué hubiera servido que antes hubiera obedecido esa Ley, en mi lugar?
Hello
La tribulación empezó el 14 de mayo 2018 con la inauguración de la embajada americana en Jerusalén.
Cuerpos frios, cristalizados por el pecado...
Traigan los dinosaurios como testigo.
Es como contradictorio muchas afirmaciones que hace. Si Dios es quien elige, como exigir al hombre que rechazo el mensaje si a fin de cuenta el hombre no puede elegir a Dios. Porque juzgarlo por algo que Dios sabe que el no puede hacer. Entonces la Salvación descansa en la oración y en la predicación. Juan 3:19 dice que la condenación reside no en la elección de Dios, sino que los hombres rechazaron a Cristo, así como el pueblo de Israel rechazo al mesías. Por otro lado, cuando en la Biblia se habla de elección no es para exclusión. La idea de Dios es que en Israel fuesen benditas todas las naciones de la tierra. Siempre que se habla de Cristo para salvación esta condicionado a creer, arrepentirse, recibir, confesar. Juan 1:7, 9. pero el necesita creer, no es automático. Ahora la acción del hombre de aceptar la salvación en Cristo no le da merito, porque es una acción de obediencia a lo que Dios ya estableció, y por otro lado, el hombre es sensibilizado para buscar a si creador por medio del E.S. pero el hombre puede rechazar o aceptar, es su decisión. Juan 1:7. Abraham la obediencia por fe, le fue contado por justicia.
minuto 21:00 "el que no esta conmigo esta contra mi" , para mi es demasiado improbable que un ser tan elevado tenga ese nivel de egolatría, para mi basta con tener una moral y una ética elevada e interés por que esos valores se conserven. No más miedo y creencias infundadas que adulan de amar al prójimo y odia y desprecia a cualquiera que piense diferente, la única prueba de su fe es su propia fe. eso es un argumento redondo, eso es una falacia argumentativa. deseo lo mejor para ustedes, y lo mejor también me sugiere recomendarles más honestidad, objetividad y racionalidad.
Estimado amigo : estas totalmente perdido, debes empezar por arrepentirte de tus pecados y acercarte a la cruz de Cristo en arrepentimiento y fe, asi el Espíritu Santo te guiará a toda verdad y comprenderás las Escrituras.
El que no está con Dios está contra Él..pero eso no anula la vida de las personas que están contra él,se supone que esto no es odio porque el que no está en Cristo está conforme con su vida pecaminosa y trata de loco a quien cree porque estos que creen "viven con sus vidas recortadas de los placeres que ellos si gozan"..para que quieres que se incluya dentro del reino de Dios a gente que no quiere?acaso algún creyente odia al que no cree,???
DESENMASCARANDO “EL OTRO” EVANGELIO
“Estoy asombrado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente.
“No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren alterar el evangelio de Cristo. “
“Pero si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anuncia un evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. “
“Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguien os predica un evangelio diferente del que habéis recibido, sea anatema” (Gá.1:6-9).
EL EVANGELIO DIFERENTE
Hay muchos que dicen (y creen) que para salvarse son necesarios dos requisitos: obedecer la Ley de Moisés, y creer en Cristo. Algunas denominaciones intercambian el orden de estas dos suposiciones. Así, algunas dicen, “para ser salvo es necesario creer en Cristo, como tu Salvador personal, y después obedecer la Ley, en agradecimiento a Dios, y prueba de que eres salvo”.
Tal amalgama (que no verdadera fusión o soldadura) es totalmente imposible. La Ley (de Moisés) y la gracia de Jesucristo están construidas sobre bases diferentes. Están en distinto terreno. Lo que pertenece a la una, no sólo no está en la otra, sino que están en antagonismo.
La Ley está apoyada en una base (o cimientos) que lo único que permite construir encima es la propia justicia (Fil.3:9); y la fe, en otra, que da acceso a la justicia (y justificación) que Dios ofrece gratuitamente al pecador. Ambas bases son independientes (no contactan entre sí), y son mutuamente excluyentes.
Por eso, Pablo dice, en Ro. 3: 21-31:
Pero ahora, aparte de la Ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la Ley y por los Profetas:
“la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo,
“para todos los que creen en él, porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios,
“y son justificados gratuitamente por su gracia [la gracia de Dios no es meramente la generosidad que Él tiene de darnos cosas “gratis”, es decir, que no merecemos. Tampoco es únicamente la cualidad bondadosa o compasiva de perdonar nuestras ofensas a Él: es el atributo divino que favorece a los ofensores o enemigos: aquellos que estaban combatiendo en las filas contrarias a Él. Y que todo cuento hacían-desde respirar, a comer o dormir- era oponerse a Su gloria],
“mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación
“por medio de la fe en su sangre [la redención es la compra de un esclavo, con el fin de libertarlo, o adquirirlo para emplearlo en la propia hacienda, donde gozará de mejores privilegios]
“para manifestar su justicia [tanto retributiva, como justificadora], a causa de haber pasado por alto, en su paciencia [no en Su justicia], los pecados pasados, con miras a manifestar en este tiempo su justicia [ahora sí, desde la cruz de Cristo, Su justicia quedó claramente evidenciada a hombres y ángeles], a fin de que él sea el justo y el que justifica al que es de la fe de Jesús.
“¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras [como la de Moisés]? No, sino por la ley de la fe. [Por eso, es completamente ridículo decir que Cristo vino a “obedecer la Ley. Y menos, en lugar de los elegidos. Él nunca obtendría nada para ellos, por esta vía].
“Concluimos, pues, que el hombre es justificado [y también redimido y santificado, 1 Co. 1:30] por la fe sin las obras de la Ley. [¿Puede apreciarse con claridad la herejía de los reformados y los teólogos del Pacto y sus seguidores, que postulan que “Cristo vino a obedecer perfectamente la Ley por ellos?”].
“¿Es Dios solamente Dios de los judíos? ¿No es también Dios de los gentiles? Ciertamente, también de los gentiles, porque Dios es uno, y él justificará por la fe a los de la circuncisión, y por medio de la fe a los de la incircuncisión. [Esto viene a demostrar, y reforzar la idea de que la justificación no tiene nada que ver con la Ley. De otro modo, los gentiles quedarían totalmente excluidos de beneficiarse del supuesto de que Cristo obedeciese la Ley en lugar de ellos, puesto que los gentiles nunca estuvieron bajo la Ley de Moisés, Ro. 2:12; 1 Co. 9:21a.
Ef. 2:12 dice de los gentiles que, antes de iniciarse la Iglesia, y su inclusión en Ella, estaban “alejados de la ciudadanía de Israel”. Recordemos que en la Iglesia están entrando tanto judíos como no judíos (gentiles), formando el tercer grupo de la división tripartita que Dios hace de la humanidad, 1 Co. 10:32.
Y, la manera de alcanzar esa ciudadanía era la circuncisión y la observancia de la Ley de Moisés, Gá. 5:3].
“Luego, ¿por la fe invalidamos la Ley? ¡De ninguna manera! Más bien, confirmamos la Ley [no porque ésta pueda salvar, o agradar a Dios, sino porque hacía necesaria la fe, para alcanzar la salvación, y la vida de gratitud/alabanza a Dios, por Su don inefable, Ro. 1:17]”.
Los teólogos del Pacto, y los reformados en general, confunden Israel (y su llamado, posición, demandas y privilegios), con la Iglesia (y los suyos). Por eso, dan un énfasis a los pactos que Dios hizo con la humanidad, indebida, para hacerse “encajar” en alguno de ellos (hasta se inventan un pacto entre Dios el Padre, y Dios el Hijo, antes de existir el universo); y una prominencia a la Ley de Moisés completamente herética (ellos piensan que Israel ha sido desechado definitivamente por Dios, y por tanto, que ellos han reemplazado a Israel. Leen Ro.11:2, por ejemplo, pero cierran sus oídos para no entender, y sus ojos, para no ver).
Así, los legalistas (de cualquier época y denominación religiosa), siempre se colocan en el centro (ese es el íntimo -en inconfesable- motivo de su obsesión con guardar la Ley: la necesidad irreductible de lograr “la justicia propia”, Fil. 3:9. La carne siempre es irreductible: ni siquiera Dios la mejora, o la cambia: sencillamente, la condena, Ro. 8:3).
Y “tirando de ese hilo”, ellos llegan a la deducción (o conclusión) de que Cristo debió obedecer (perfectamente) la Ley de Moisés durante Su vida, a favor de ellos. De otro modo -según creen- no podrían ser salvos.
Y, así, tuercen las Escrituras para que digan lo que no dicen (y es imposible que digan).
POR QUÉ CRISTO NO OBEDECIO LA LEY, Y ¿QUÉ IMPLICARÍA SI LO HUBIESE HECHO?
He.5:8 dice de Cristo que, “aunque era Hijo, a través del sufrimiento aprendió lo que es la obediencia” (RVR95).
“Así que Cristo, a pesar de ser Hijo, por lo que sufrió aprendió a obedecer” (DHH).
Si Cristo necesitó toda Su vida para aprender la obediencia a Dios (estando en la condición de hombre), ¿Cómo es que dicen algunos que obedeció perfectamente la Ley en lugar de ellos, para salvarlos? Y si fue así, ¿en qué momento lo hizo?
No olvidemos que, hasta después de Su obra en la Cruz, y Su resurrección, la Ley de Moisés estuvo vigente para Israel en todos sus capítulos. ¿Dónde dicen las Escrituras que Cristo obedeció esa Ley, en todos sus términos (porque, si solamente hubiera dejado de obedecer uno de ellos, hubiera sido culpado de todos, Lv.4:22; Gá?5:3; Stg. 2:10)? ¿Diezmaba? ¿Presentaba ofrendas? ¿Hacía sacrificios?, etc.
Sin embargo, las Escrituras dicen que Le llevó toda una vida en la tierra para aprender la obediencia.
Las Escrituras dan testimonio de que Él no nació “perfecto”, sino que precisó del proceso de la vida humana (una existencia corporal y social) que le proporcionase el aprendizaje necesario para ser perfeccionado. No sólo en los primeros años de ella, como puede verse en Lc. 2:51-52, donde dice que teniendo Jesús 12 años, “descendió con ellos [sus padres] y volvió a Nazaret, y les estaba sujeto…. Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia para con Dios y los hombres”, sino de todo el tiempo que vivió entre nosotros.
Eso podemos deducirlo del tipo de vida que llevó. De los eventos dolorosos, decepcionantes y traumáticos por los que pasó, durante toda Su vida (tanto fuera como dentro del círculo de los Suyos), hasta el momento de Su regreso al cielo. Y, hasta ese momento, estuvo en la escuela de Dios en esta vida y en esta tierra, aprendiendo la obediencia.
Así, también las Escrituras dicen en He. 2:10 que “convenía a aquel por cuya causa existen todas las cosas y por quien todas las cosas subsisten que, habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionara por medio de las aflicciones al autor de la salvación de ellos” (RVR95).
Y en otra versión: “Todas las cosas existen para Dios y por la acción de Dios, que quiere que todos sus hijos tengan parte en su gloria. Por eso, Dios, por medio del sufrimiento, tenía que hacer perfecto a Jesucristo, el Salvador de ellos” (DHH).
Entonces, si Jesús no fue perfecto (en cuanto a la obediencia) hasta el momento de Su partida de esta tierra, ¿Cómo dicen algunos que, durante Su vida, obedeció “perfectamente” la Ley, en lugar de ellos, para así salvarlos?
Ahora, la cuestión puede verse también desde otro ángulo. Si Cristo obedeció (durante el trascurso de Su vida en la tierra) perfectamente la Ley en mi lugar, entonces, a efectos legales (en lo tocante a la justicia Divina), se me imputó a mí mismo esa obediencia. Es como si yo mismo la hubiera obedecido. ¿No es eso lo que quiere decir “en mi lugar”?
De lo anterior, se suscitan dos cuestiones difíciles para los que abogan por esa teoría “teológica” (sé que es duro decir “infernal”, pero es lo que es: un artificio diabólico):
1ª) Si yo obedecí la Ley de Moisés (aunque yo no soy judío ni israelita, y nunca estuve bajo esa Ley), la Ley -una vez obedecida- ya no podía maldecirme, y en ese caso yo mismo (en mi Sustituto) obtuve la vida. Porque las Escrituras dicen al respecto: “Moisés escribe así de la justicia que es por la Ley: el hombre que haga estas cosas vivirá por ellas” (Ro. 10:5).
Y, en Gá.3:12, dicen: “Pero la Ley no procede de la fe, sino que dice “El que haga estas cosas vivirá por ellas”.
2ª) Y si lo anterior fuese cierto: que Jesucristo obedeció perfectamente la Ley en lugar de ellos, y por tanto los libró de la maldición que ella trae sobre los que no la obedecen, y así mismo les obtuvo la vida (como vimos anteriormente), ¿Cómo es que éstos también dicen que Jesucristo tuvo que morir en la cruz para cumplir la justicia “del Padre”?
Ellos dicen que Cristo obedeció perfectamente la Ley durante toda Su vida. Y que eso lo hizo en lugar de ellos mismos. De ahí se deduce que la maldición de Dios a los que la desobedezcan, fue quitada de sobre ellos (o, mejor dicho, nunca estuvieron bajo ella, porque nacieron muchos años después de que Cristo la hubiese obedecido en lugar de ellos).
No obstante, afirman que Cristo fue a la cruz ¡¡para satisfacer la justicia que “el Padre” demandaba de los infractores de la Ley!! (¡Sin palabras, ante semejante incoherencia y despropósito!!!).
NOTA 1: Esta última afirmación tampoco es bíblica, porque Cristo se ofreció al Padre, sí, pero no para cumplir la justicia del Padre, sino la de Dios, siendo Él, y el Espíritu Santo, también Dios.
NOTA 2: “La Ley no procede de la fe”. No sé cómo explicarán esto los legalistas, entre los cuales están los teólogos del Pacto, y sus seguidores: Si Jesús Se pasó toda Su vida obedeciendo “perfectamente” la Ley… ¿estaba actuando con fe? (cifr. He.12:2; Ap. 14:12).
Y si a mí mismo se me imputa la obediencia (perfecta) a esa Ley, en la Persona de mi Representante legal, entonces es claro que se me imputan obras, y no fe (cifr. Ro. 11:6).
¿Cómo se armoniza eso con la afirmación de las Escrituras de que “sin fe es imposible agradar a Dios” (He. 11:6)?
Los predicadores de la teología del Pacto saben muy bien que la fe es imprescindible para obtener la salvación (Ro.1:17-18; 3:22, 25, etc.). El propio apóstol Pablo, decía esto de sí mismo:
“Pero cuantas cosas eran para mí ganancia (entre esas cosas, estaba la obediencia a Ley de Moisés), las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida (esa convicción continuaba estando en él, aun siendo ya cristiano, y apóstol comisionado directamente por Jesucristo) por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor.
“Por amor a él lo he perdido todo (cualquier justicia que él hubiera podido, tal vez, lograr con sus obediencias, renuncias, sacrificios, etc.) y lo tengo por basura, para ganar a Cristo y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que se basa en la Ley, sino la que se adquiere por la fe en Cristo, la justicia que procede de Dios y se basa en la fe” (Fil. 3:7-9).
Dice Pablo que “la propia justicia” se basa en la Ley. ¿Qué buscan estos teólogos del Pacto -y sus seguidores- cuando se quieren amparar bajo el paraguas de la Ley de Moisés (en este caso, obedecida en lugar de ellos por Otro)? ¿Por qué están tan interesados en obedecer la Ley, al punto que le hacen decir a las Escrituras que -como ellos son pecadores, y Cristo vino a salvarles- Él se encargó de obedecer la Ley en lugar de ellos (cosa que ni remotamente dicen)? ¿A quién pretenden impresionar?
Cuando el ojo de alguien está enfermo, le dificulta (o le impide por completo) la visión. No conocen cabalmente a Jesucristo y, en consecuencia, no distinguen con nitidez entre Israel y la Iglesia. “Pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas [todo tu conocimiento, todas tus doctrinas, estarán afectadas por “esa levadura” que hace fermentar la buena masa que leen en sus Biblias, volviéndolas confusas, distorsionadas]. Así que, si la luz que hay en ti es tinieblas, ¿Cuántas no serán las mismas tinieblas?” (Mt. 6:23).
Y, donde hay confusión y tinieblas, allí Satanás hace su obra.
Bien dice el Señor que “un poco de levadura, leuda toda la masa” (1 Co.5:6; Gá. 5:9). Esa levadura: la compulsión religiosa, que siempre tiene pretensiones “farisaicas” de cumplir la Ley (o cualquier otro código de moral y/o conducta), deriva en una confusión (mezcla) entre la Ley y la gracia, que les conduce a tener una cosmovisión errada de los planes de Dios, y de Su Evangelio. Y no sólo hay serios errores en su teología, sino que hay absurdos y herejías (apartamientos graves de la verdad y del Evangelio).
Estos, aun leyendo y predicando frecuentemente sobre aquella arrogancia que envolvía a los cristianos en Roma, cuando pensaban que Israel estaba ya obsoleto, y que ellos habían venido a sustituirles, o continuarles en una versión mejorada, participan de la misma arrogancia.
Esta arrogancia que los asediaba, consistía en creer que Israel había fracasado de forma definitiva y que, por tanto, Dios los desechó para siempre. Y, que ellos, habían venido para sustituir o bien continuar a Israel en otra posición más privilegiada. En otras palabras, se creían la última coca cola en el desierto. Y al Israel étnico, y nacional, lo tiraban al cubo de la basura (Ro.11:24).
Pero Dios, después de señalar (recordándoles) que llamó a Israel, y le dio dones y promesas (casi todas ellas aún sin cumplir), les dice a aquellos y a éstos “arrogantes”: “irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios” (Ro.11:29). ¿Qué hay en sus mentes, que no pueden entender esto?
No especifica a profundidad sobre la justificación por la FE en JESÚS, o la justicia de DIOS por la FE en JESÚS, romanos 5- 19, somos la justos por la obediencia de JESÚS!!!!!, no somos justos por nuestra propia obediencia, romanos 1- 17 Pablo dice que en el evangelio la justicia de DIOS se revela al hombre por FE, la justicia de DIOS es revelada al hombre , de esta forma el hombre tiene revelación de la justicia de DIOS 2da corintios 5- 21, JESÚS fue hecho pecado, para que nosotros fuésemos hechos justos o justicia de DIOS, nosotros somos la justicia de DIOS!!!!, Cuando JESÚS dice más buscad primeramente el reino de DIOS y su justicia, osea buscad la justicia de DIOS, nosotros somos la justicia de DIOS!!!!, somos la voz de DIOS, no vamos a decir que comeré?, que vestiré?, no!!!, de ninguna manera! el pecador dice así, es normal, porque es pecador, se guía por las apariencias, es su mentalidad, nosotros no!!! somos la justicia de DIOS!!!, Somos justos!!! , no vamos a decir que comeré?, No sino vamos a decir!!! : Tengo para comer!!, No me falta nada!! soy bendecido, !!! cuando trabajo, trabajo con esa mentalidad trabajo reposado, trabajo en paz!!, El pecador, trabaja preocupado, este varón no edifica nada! no es caliente con el tema de la justicia de DIOS
Amigo Hector: debetias escuchar y ver toda la serie de Romanos y con la iluminación del Espiritu Santo, escudriñar con humildad las escrituras, antes de emitir esos juicios sobre este varón de Dios.
No es un escándalo. Es un timo, una fábula para ignoranted
Que lindo mensaje y gracias pastor Sugel Michelén