Uno de los miedos escritoriles más antiguos... Debe ser: ¡ Oh! ¡Y ahora sobre qué, voy a escribir, si ya está todo escrito! (declamado, esto último... Mirando hacia la lontananza ... Con exagerado amaneramiento y fingido dolo). Ya a mediados de 1800, lo decía Bécquer: No digáis que agotado su tesoro, de asuntos falta, enmudeció la lira. Podrá no haber poetas, pero siempre habrá poesía.
Una alma contiene al mismo tiempo la integral de la voluntad ( creación, fuerza pura -el continúo eterno de la razon-, el espíritu, y a la medida humana, las relaciones - no antirrelaciones, caracteres repulsivos-, y el poder de la ética, cosa que no se halla en ningún ciclo de la naturaleza existencial, pues se pudriria, sino que es la vista de la luz real, esa que no depende del defecto de la evolución, pues lleva implícita la perfección, esa que no depende del defecto del nacimiento, pues tendría que morir. Bueno decía que una alma contiene la entereza de la voluntad, junto con el despropósito de nuestra forma del conflicto, que es lo mocho, lo medio hecho, nuestros vicios y abismos, y por este contraste se recomienda narrativamente un distanciamiento deseable al que se desea ir para relajarse del otro lado ordinario cuando se está en la alternativa radical o en la alternativa armónica, misma que va pesando y haciéndose conflictiva, y de la que se descansa llendo al otro lado del conflicto corriente y ordinario pero también insoportable. Estos dos conflictos son una misma parte del alma, pero está tiene su contraste divino con aquel arte que toda alma lleva implícito y escrito de ser especial en un sentido único e infinito, respecto del cual hacen alusión los exilios hiper físicos que corren por veredas de la imaginación o por lo más profundo de la intuición que deja ver un cristal o un espejo en base a esa referencia eterna e indudablemente perfecta.
😮😮😮Tremendo comentario Pao...Super acertado😅😊❤
Mil gracias!!
Nada más bonito que sus lecturas y consejos ✨
Uno de los miedos escritoriles más antiguos... Debe ser: ¡ Oh! ¡Y ahora sobre qué, voy a escribir, si ya está todo escrito! (declamado, esto último... Mirando hacia la lontananza ... Con exagerado amaneramiento y fingido dolo).
Ya a mediados de 1800, lo decía Bécquer:
No digáis que agotado su tesoro,
de asuntos falta, enmudeció la lira.
Podrá no haber poetas, pero siempre
habrá poesía.
Una alma contiene al mismo tiempo la integral de la voluntad ( creación, fuerza pura -el continúo eterno de la razon-, el espíritu, y a la medida humana, las relaciones - no antirrelaciones, caracteres repulsivos-, y el poder de la ética, cosa que no se halla en ningún ciclo de la naturaleza existencial, pues se pudriria, sino que es la vista de la luz real, esa que no depende del defecto de la evolución, pues lleva implícita la perfección, esa que no depende del defecto del nacimiento, pues tendría que morir. Bueno decía que una alma contiene la entereza de la voluntad, junto con el despropósito de nuestra forma del conflicto, que es lo mocho, lo medio hecho, nuestros vicios y abismos, y por este contraste se recomienda narrativamente un distanciamiento deseable al que se desea ir para relajarse del otro lado ordinario cuando se está en la alternativa radical o en la alternativa armónica, misma que va pesando y haciéndose conflictiva, y de la que se descansa llendo al otro lado del conflicto corriente y ordinario pero también insoportable. Estos dos conflictos son una misma parte del alma, pero está tiene su contraste divino con aquel arte que toda alma lleva implícito y escrito de ser especial en un sentido único e infinito, respecto del cual hacen alusión los exilios hiper físicos que corren por veredas de la imaginación o por lo más profundo de la intuición que deja ver un cristal o un espejo en base a esa referencia eterna e indudablemente perfecta.
En el alambre, como los funambulistas.👠🐊