PLAYA SAN MIGUEL (EL ROMPIDO/CARTAYA) - HUELVA

La costa de Huelva nos ofrece fantásticos trocitos de paraíso como, por ejemplo, la playa de San Miguel, en la órbita del complejo turístico de El Rompido, dentro del término municipal de Cartaya.
Un cartel nos anuncia que estamos en la playa de San Miguel, en El Rompido, y junto a él, la estructura en madera del puesto de socorrismo de dicha playa.
Pronto nos percatamos que estamos en un precioso entorno natural, con arenas finas y blancas contrastando con el verdor del inmenso pinar cartayero. Esas arenas cambian de color cuando nos vamos acercando a la orilla de la playa, combinando distintos tonos dependiendo del grado de humedad.
La playa de San Miguel es el nombre con el que se conoce el tramo de playa situado entre los núcleos urbanos de El Rompido y Nuevo Portil, ambos pertenecientes a la localidad de Cartaya. Tomó su nombre por el castillo de San Miguel Arca de Buey, en El Rompido, creado para el control de la zona del río Piedras y abandonado en el siglo XVI por las frecuentes incursiones de piratas berberiscos, siendo finalmente destruido por piratas holandeses. Precisamente, San Miguel fue el nombre del primer poblado de lo que hoy es El Rompido.
De los dos kilómetros de longitud que aproximadamente tiene esta playa, que comienza (o termina) prácticamente junto al núcleo de El Rompido, elegimos como punto de partida estelar la zona del antiguo camping Catapum (ya cerrado), muy conocido en Huelva. A partir de la carretera A-5052 que va de Cartaya a El Rompido, unas escalinatas nos conduce hasta la playa.
El antiguo camping Catapum siempre ha sido un referente para todos los onubenses. Era un lugar de encuentro y punto donde se ubica el trasbordador que cada verano realiza los traslados de ida y vuelta hacia la flecha litoral que se sitúa justo enfrente, con playa virgen (Nueva Umbría) abierta al océano en la otra orilla de la flecha.
Apreciamos una panorámica amplísima del inmenso pinar y las arenas blancas y brillantes, iluminadas por una luz exclusiva en esta porción de la Costa de la Luz, todo un regalo de la madre naturaleza. También observamos una amplia panorámica de la orilla de esta playa fluvial, sus arenas y pinos. Y es que esta playa es fluvial, y se encuentra en el campo de acción del río Piedras, ya convertido en ría por la presencia cercana del gran mar salado, que espera con impaciencia e ilusión la acogida de sus aguas.
La playa de San Miguel reúne todos los requisitos de belleza y armonía paisajística. Podemos observar cómo el pinar llega justo hasta la playa, así podemos elegir, si llegamos a tiempo, una sombrilla natural en forma de pino piñonero. Ese mismo entorno favorece a que el turismo activo sea un gran aliciente entre la naturaleza y el mar, siendo ideal para la práctica del senderismo y algunos deportes náuticos. También podemos dar un paseo por una pasarela de madera, paralela a la playa y entre pinos, retamas y enebros, en compañía del camaleón, atravesando los arroyos del Pino y Culata, hasta llegar a Nuevo Portil.
Pero vamos a tomar la dirección contraria, hacia poniente, para apreciar la blanca figura de El Rompido, precioso pueblo marinero, antiguo San Miguel, un paraíso que ha sabido adaptarse a la triple transición de pueblo de pescadores a un lugar de verano de segunda residencia y más recientemente a un enclave turístico con hoteles y núcleos residenciales de calidad, sin por ello perder su esencia.
Antes de llegar a El Rompido observamos el puerto deportivo San Miguel, Asociación Deportiva Náutica San Miguel, con un pantalán para más de 280 atraques.
Esta preciosa paisajística la despedimos saliendo de la playa por una pasarela de madera, cómodo acceso para acercarnos a la orilla de esta singular playa, la playa de San Miguel.
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