25 anos cos montes veciñais

แชร์
ฝัง
  • เผยแพร่เมื่อ 9 พ.ย. 2024

ความคิดเห็น • 7

  • @reconstruirelcomunal
    @reconstruirelcomunal 2 ปีที่แล้ว +1

    ¡Muy interesante!

  • @minilike2647
    @minilike2647 3 ปีที่แล้ว

    En galego si que dá gusto

  • @carloscarnota8979
    @carloscarnota8979 2 ปีที่แล้ว +1

    El que quiera informarse sobre lo que ocurre en algunas comunidades de montes que busque en internet. Operacion Espilipto ( boiro) o Axena denuncia falsa a la comunidad de montes de Baroña. Un saludo

  • @carloscarnota8979
    @carloscarnota8979 2 ปีที่แล้ว

    Antes lo gestionaba la administracion y nos robaban? Por lo menos teniamos zonas de pastoreo libres y gratis en cualquier parte desde las famosas "ribeiras" de las playas, cientos de vacas en cada pueblo limpiando la zona entre fincas particulares y zona de playas hasta los altos de los montes, sacabas el mato y leña para todo el año y no pagabas nada. Ahora desde que essta gestionado por asociaciones o comunidades de montes en man comun, pagas por todo, reciben subvenciones y los beneficios para los integrantes de esas asociaciones o comunidades de montes y amiguetes que en su mayoria no revierten nada en el monte. Se puede ver el incremento de incendios y el estado en que se encuentran los montes en su mayoria. Eso si, que las subvencioones no falten y eolicos tampoco.

    • @asociacionforestaldegalicia
      @asociacionforestaldegalicia  2 ปีที่แล้ว +1

      Las comunidades de montes vecinales en mano común gestionan sus montes por derecho consuetudinario propio, de forma democrática, según las ordenanzas o estatutos que han aprobado los comuneros. Siempre se han aprovechado los terrenos comunes de acuerdo a normas escritas o no escritas, siendo los beneficiarios exclusivamente los miembros de la comunidad vecinal. El monte vecinal no es tierra libre, donde cualquiera puede sacar provecho.
      Como propiedades privadas que son, los comuneros pueden poner límites a su uso público o privativo, conforme a las leyes y normas que regulan estas propiedades, al igual que cualquiera otra persona o entidad puede disponer de sus propiedades privadas.
      Las comunidades de montes vecinales en mano común tienen derecho a recibir subvenciones, como recibe subvenciones el resto del sector agrario. Las subvenciones están destinadas a ayudar a la financiación de la gestión, conservación y mejora de los montes. Con las ayudas económicas a los montes vecinales se genera empleo en el mundo rural, se previenen incendios forestales, se mitigan las plagas y enfermedades, se mejora el medioambiente, se diversifican las producciones, etc.
      En Galicia, la ley estipula que las comunidades de montes vecinales en mano común deben reinvertir en la gestión forestal de su monte el 40 %, como mínimo, de todos sus ingresos, y en el caso de que los ingresos procedan de aprovechamientos de montes quemados, este porcentaje es del 100 %. Este nivel de reinversión en los montes vecinales permite la existencia de más de 1.400 empresas vinculadas directamente a la actividad forestal, que en conjunto suman más de 9.000 empleos directos.
      Una vez aplicada la cuota de reinversión, muchas comunidades propietarias invierten en la puesta en valor del propio monte vecinal desde el punto de vista social, patrimonial, cultural y ambiental. También es destacable la importante labor que hacen las comunidades de montes en la dotación de infraestructuras culturales y sociales en muchas áreas rurales gallegas y en el apoyo a iniciativas vecinales.
      Las comunidades de montes vecinales en mano común están obligadas a cumplir con sus obligaciones en materia fiscal (Impuesto sobre Sociedades, Impuesto sobre el Valor Añadido, Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados...).
      Para la justificación de todos los gastos en los que incurren las comunidades de montes es requisito indispensable contar con soporte documental válido: facturas, nóminas, gastos de seguridad social, etc.
      La relación entre el tipo gestión de los montes vecinales en mano común y los incendios forestales, que sepamos no ha sido estudiada de momento y en cualquier caso, los indicios de varios ejemplos observados en los últimos años, nos llevan a pensar que la relación es justamente la contraria de la que usted menciona.