Perfecto profesor Daniel, tengo meses buscando un instructor que me enseñara la técnica desde el inicio, muchas gracias aprendí bastante y le enseñare a mi hijo tambien, saludos desde Panamá.
Creo que sí es imprescindible empezar a jugar con una raqueta de un nivel bajo (ojo, no hablo de baja calidad sino nivel). Alguien que está aprendiendo a manejar un automóvil no puede hacerlo en un monoplaza de Fórmula 1, no podría controlarlo. Lo mismo sucede con las gomas y con la madera. Una goma demasiado dura no ofrece control, la bola sale disparada y el estudiante verá afectada su curva de aprendizaje, peor aún es el caso de la madera, si es una madera demasiado dura y no digamos si tiene carbono, el jugador no podrá "sentir" la bola y de igual manera el control se verá afectado.
Muy bueno..falto la otra parte del video..
Perfecto profesor Daniel, tengo meses buscando un instructor que me enseñara la técnica desde el inicio, muchas gracias aprendí bastante y le enseñare a mi hijo tambien, saludos desde Panamá.
Excelente Daniel !!! Un abrazo desde Uruguay
Gran enseñanza para una tecnica vencedora
Excelente Video, felicitaciones.
Profesor buenos días me puede colaborar con el modelo de la bola con un alambre para la sombra de los golpes gracias
Genial video. Gracias por compartirlo. No tienes más ? De las otras clases de este hombre.
Saludos
pone en el canal DANIEL CHU
Que pais es??
Buenos Aires, Argentina
Creo que sí es imprescindible empezar a jugar con una raqueta de un nivel bajo (ojo, no hablo de baja calidad sino nivel). Alguien que está aprendiendo a manejar un automóvil no puede hacerlo en un monoplaza de Fórmula 1, no podría controlarlo. Lo mismo sucede con las gomas y con la madera. Una goma demasiado dura no ofrece control, la bola sale disparada y el estudiante verá afectada su curva de aprendizaje, peor aún es el caso de la madera, si es una madera demasiado dura y no digamos si tiene carbono, el jugador no podrá "sentir" la bola y de igual manera el control se verá afectado.
La goma dura tiene mas control que la blanda, no comentes sin saber