A mi también me gusta escucharlo para dormir,el problema es cuando se termina y empiezan otro tipo de vídeos,termino soñando con pepa pig o algo peor jajaja
Tres príncipes guerreros y una princesa son los protagonistas de una emocionante aventura que tiene lugar en la lejana India. Los tres príncipes Gupta y sus acompañantes montaban sus elegantes elefantes blancos. Los animales se deslizaban por una espaciosa avenida saturada de muros de piedra labrada que ostentaban los signos del reino. Los hermanos pasaban por debajo de altos balcones y sobre los pétalos de exótica fragancia que eran arrojados por los ciudadanos. Ante ellos, iban elevándose los imponentes muros y las grandes cúpulas que derramaban sus sombras sobre el camino que conducía hacia el palacio del emperador Otali. Finalmente, cruzaron por debajo de un gran arco de color blanco realzado con un reborde de borlas de mármol, que llevaba hacia los jardines de recreo del monarca. Nirek el primer hijo de Otali, iba orgulloso por delante; Ojayit, el segundo hijo, lo seguía de cerca, atento a empuñar su filosa arma contra cualquier enemigo, y, asimismo, Nayakan, su hermano menor y otro virtuoso con las armas, iba detrás de ellos. Los seguían por detrás filas de guardias armados con lanzas de variados estilos. Al final, avanzaba un largo séquito de sacerdotes, esos viejos que se dedicaban al estudio de las leyes divinas, y que la pasaban encorvados sobre antiguos pergaminos. Todos recibían saludos alegres del pueblo. El nacimiento del príncipe Nirek ocurrió en una tranquila noche, mientras la plateada Luna daba su sereno rostro y se desplazaba a través de las estrellas. Otali estaba impaciente, pero sabía que la paciencia es como un árbol de raíz insípida que produce dulces frutos. Unos días después ocurrió la ceremonia para darle un nombre al bebé; se le bendijo y los sacerdotes le desearon una larga vida llena de riqueza y sabiduría. Después, el niño fue colocado sobre el regazo de su padre y recibió su bendición. El sacerdote principal ofreció su plegaria a los dioses y a los espíritus de los antepasados del clan, para poder obtener sus bendiciones. Los clarividentes predijeron que algún día, este pequeño realizaría memorables acciones, y sería él uno de los prodigios de su creador. Nirek sería grande en pensamientos y en hechos; el hijo de Otali tendría un alto sentido de la justicia, su razón sería elevada, sus acciones rectas y firmes, y sería por derecho, el emperador de Panyab. Ojayit era el segundo hijo de Otali y era dos años menor que Nirek. Desde pequeño se notaron en él cualidades atléticas. Al reconocer las habilidades de Ojayit, su padre le obsequió una espada de esplendor sin igual. Era un regalo de los dioses, y al recibirlo, Ojayit sintió un llamado interior a convertirse en un gran maestro. La espada, adornada con el rostro de un dios de oro en el centro del pomo, descansaba sobre un fondo de esmalte negro, con los símbolos del imperio finamente tallados en el mango. Al empuñarla, el joven Ojayit sentía cómo la hoja cortaba el aire, llenándolo de una profunda admiración. Nayakan, el tercer hijo de Otali, compartía con Ojayit una virtuosidad innata en el arte del combate. Este amable príncipe, de amplia frente y ojos oscuro, tenía un gran afecto por sus familiares, y visitaba a su abuelo con frecuencia. Paramjit, padre de Otali, se destacaba por su rectitud, honorabilidad y habilidad para resolver problemas con la ayuda de sus hijos y consejeros. Este anciano fue uno de los emperadores Gupta más queridos por su pueblo. Un día, consideró que era necesario que oficiales de prestigio o guerreros expertos impartieran la instrucción necesaria a sus nietos. Así, se embarcó en la búsqueda de los mejores instructores del reino para llevar a cabo esta tarea. Ojayit practicaba con la espada, y sus compañeros observaban la soltura de sus movimientos, la gracia de sus ritmos, y la variedad de sus ataques. El príncipe practicó con esfuerzo hasta llegar a la excelencia, y al igual que sus hermanos, realizó el rígido entrenamiento cada día de la escuela militar.
la verdad.... no c que pensar ... vine a escuchar terror y ajeno a eso la historia 3 casi me dureme.. no le encontre nada de terror a eso. este canal ya esta perdiendo lo terrorifico... ponen cualquier cosa. aburrida
Saludos todas las noches veo sus videos antes de dormir a veces me quedo dormida escuchándolo es el mejor
¡Que bueno que te relajan las historias!🙏
A mí también me ayuda a dormir ❤
Y lo mejor es soñar con los relatos, ser protagonista de estás historias.
Que bueno llgar a la casa y relajarse viendo estos videos ☺️
Me encantan estas historias
Soy trailero y mayormente viajo de noche, para espantar el sueño compro mi cafe y escucho estas historias, muy entretenidas.
A mi también me gusta escucharlo para dormir,el problema es cuando se termina y empiezan otro tipo de vídeos,termino soñando con pepa pig o algo peor jajaja
Jaja si pasa, desactiva la reproducción automática
HAHAHAHA
😂😂😂😂😂
😅😅😅😅😅
Primero 🎉
Buenas tardes que tenga una excelente fin de semana bonita excelente relato son muy buenos los mejores 💯💯💙💙🩶🤎❤️🖤🫢🤔🙄🙄🩵💚🪨🤐😏💯💯🏚️💜⛰️🤫
Feliz fin de semana! 🙏
El último relato empezó con un poco de terror 😱😱😱 pero después ya estaba muy imaginario, me decepcionó 😮😮.
Tres príncipes guerreros y una princesa son los protagonistas de una emocionante aventura que tiene lugar en la lejana India.
Los tres príncipes Gupta y sus acompañantes montaban sus elegantes elefantes blancos. Los animales se deslizaban por una espaciosa avenida saturada de muros de piedra labrada que ostentaban los signos del reino. Los hermanos pasaban por debajo de altos balcones y sobre los pétalos de exótica fragancia que eran arrojados por los ciudadanos. Ante ellos, iban elevándose los imponentes muros y las grandes cúpulas que derramaban sus sombras sobre el camino que conducía hacia el palacio del emperador Otali. Finalmente, cruzaron por debajo de un gran arco de color blanco realzado con un reborde de borlas de mármol, que llevaba hacia los jardines de recreo del monarca.
Nirek el primer hijo de Otali, iba orgulloso por delante; Ojayit, el segundo hijo, lo seguía de cerca, atento a empuñar su filosa arma contra cualquier enemigo, y, asimismo, Nayakan, su hermano menor y otro virtuoso con las armas, iba detrás de ellos. Los seguían por detrás filas de guardias armados con lanzas de variados estilos. Al final, avanzaba un largo séquito de sacerdotes, esos viejos que se dedicaban al estudio de las leyes divinas, y que la pasaban encorvados sobre antiguos pergaminos. Todos recibían saludos alegres del pueblo.
El nacimiento del príncipe Nirek ocurrió en una tranquila noche, mientras la plateada Luna daba su sereno rostro y se desplazaba a través de las estrellas. Otali estaba impaciente, pero sabía que la paciencia es como un árbol de raíz insípida que produce dulces frutos.
Unos días después ocurrió la ceremonia para darle un nombre al bebé; se le bendijo y los sacerdotes le desearon una larga vida llena de riqueza y sabiduría. Después, el niño fue colocado sobre el regazo de su padre y recibió su bendición. El sacerdote principal ofreció su plegaria a los dioses y a los espíritus de los antepasados del clan, para poder obtener sus bendiciones. Los clarividentes predijeron que algún día, este pequeño realizaría memorables acciones, y sería él uno de los prodigios de su creador. Nirek sería grande en pensamientos y en hechos; el hijo de Otali tendría un alto sentido de la justicia, su razón sería elevada, sus acciones rectas y firmes, y sería por derecho, el emperador de Panyab.
Ojayit era el segundo hijo de Otali y era dos años menor que Nirek. Desde pequeño se notaron en él cualidades atléticas. Al reconocer las habilidades de Ojayit, su padre le obsequió una espada de esplendor sin igual. Era un regalo de los dioses, y al recibirlo, Ojayit sintió un llamado interior a convertirse en un gran maestro. La espada, adornada con el rostro de un dios de oro en el centro del pomo, descansaba sobre un fondo de esmalte negro, con los símbolos del imperio finamente tallados en el mango. Al empuñarla, el joven Ojayit sentía cómo la hoja cortaba el aire, llenándolo de una profunda admiración.
Nayakan, el tercer hijo de Otali, compartía con Ojayit una virtuosidad innata en el arte del combate. Este amable príncipe, de amplia frente y ojos oscuro, tenía un gran afecto por sus familiares, y visitaba a su abuelo con frecuencia.
Paramjit, padre de Otali, se destacaba por su rectitud, honorabilidad y habilidad para resolver problemas con la ayuda de sus hijos y consejeros. Este anciano fue uno de los emperadores Gupta más queridos por su pueblo. Un día, consideró que era necesario que oficiales de prestigio o guerreros expertos impartieran la instrucción necesaria a sus nietos. Así, se embarcó en la búsqueda de los mejores instructores del reino para llevar a cabo esta tarea.
Ojayit practicaba con la espada, y sus compañeros observaban la soltura de sus movimientos, la gracia de sus ritmos, y la variedad de sus ataques. El príncipe practicó con esfuerzo hasta llegar a la excelencia, y al igual que sus hermanos, realizó el rígido entrenamiento cada día de la escuela militar.
Primero xd
Me enfado q no los escucho hasta el final x q me quedo frito hasta x la mañana 😂
😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱
19:50 pero no le di importancia
🇩🇴
AVECES PONEN HISTORIAS QUE LO UNICO QUE ME PROVOCA ES VER OTRA COSA PORQUE ME ABURRE!
Son relatos reales o producto de tu imaginación?😮😮😮
SUPUESTA MENTE SON REALES!!!
Jaja ellos no sabemos nada es satanás cumpliendo su proposito
la verdad.... no c que pensar ... vine a escuchar terror y ajeno a eso la historia 3 casi me dureme.. no le encontre nada de terror a eso. este canal ya esta perdiendo lo terrorifico... ponen cualquier cosa. aburrida
SI ES CIERTO DEVERIA ESCOGER MEJOR SUS RELATOS QUE QUE EN OCACIONES METEN RELATOS QUE DEVINITIVA MENTE TE ABURREN! TE VENDEN ORO Y RECIVES BASURA!