“Vida en el desierto” - Darvin Delnardo / Domingo 14 de julio 2024

แชร์
ฝัง
  • เผยแพร่เมื่อ 9 พ.ย. 2024
  • Las características de un desierto hacen que este lugar tenga mucha pedagogía. Hay mucho que aprender de los desiertos y, si recorremos la Biblia, podemos notar el trato especial de Dios con su pueblo y con varios hombres y mujeres en el desierto.
    Recordemos, a Israel dando vuelta en el desierto de Sinaí durante 40 años, un poco antes Abraham camino a la tierra prometida, Agar huyendo con su hijo, Moisés escapando como fugitivo, David huyendo de Saul, y Jesús 40 días y cuarenta noches ayunando en un desierto.
    Para nosotros un desierto puede también representar lo que vivimos por dentro. No estamos en Atacama, pero las temperaturas extremas del corazón y la sequedad de nuestra relación con DIOS, el silencio de la espera, los escasos resultados de nuestros proyectos, la soledad, el dolor pueden estar indicándonos que estamos atravesando un árido desierto.
    En el mensaje del domingo, hablamos de desiertos a los que Dios nos llama como parte de su proceso y trato especial con nosotros, pero también hay desiertos a los que huimos y nos escondemos producto de nuestras propias y equivocadas decisiones.
    Desierto 1: Dios nos lleva
    • Para enseñarnos a depender de Su poder y no de nuestros propios recursos. Nuestros recursos no son nada en el desierto. No se trata de ti y tus capacidades dependes del poder de Dios.
    • Para entrenarnos en la oración y en la fe.
    • Para confirmar tu propósito y llamado.
    Desierto 2: Al que huimos
    En el desierto…
    • Dios es Señor: Él conoce cada rincón del desierto en el que te encuentras, aunque hayas huido para esconderte de él. Toda circunstancia que envuelve a tu desierto está bajo su autoridad. Dios no se intimida ni se achica frente a lo que estás viviendo.
    • Dios es tu sustentador: Él enviará ángeles para que te sustenten. Esos Ángeles podemos ser nosotros en el desierto que pueda estar atravesando nuestro amigo, hermano miembro de este grupo, acompañando, orando, dando de nuestro tiempo y recursos.
    • Dios es quien te levanta: los desiertos son temporales, no fuiste creado para vivir en un desierto por siempre. Dios tiene el poder para levantarte, déjate ayudar, deja de pelear en tus propias fuerzas, levántate y come lo que él ha preparado para ti.
    • Dios es quien te lleva de vuelta a tu propósito: Dios no ha terminado contigo, su propósito aún no está completado. Tú eres valioso para su reino, tu familia te necesita, tus hijos esperan, tus padres anhelan verte crecer. Si los pensamientos de muerte han llegado a tu corazón, ciérrales la puerta, ese no es el plan de Dios para ti, él no ha terminado contigo, háblalo, busca la ayuda de tu comunidad. Tú eres valioso y tienes mucho camino por recorrer aun.
    Preguntas de reflexión:
    1. ¿Has podido experimentar a Dios en medio de algún desierto personal? ¿Cómo fue?
    2. ¿Has podido experimentar el sustento de tu comunidad de fe en medio del desierto?
    3. ¿De qué maneras practicas podemos ser “ángeles de Dios” en medio del desierto de un amigo/amiga?

ความคิดเห็น •