El calor específico de los sólidos (igual que el de los gases y líquidos) es función creciente de la temperatura, tendiendo a cero cuando ésta se aproxima a los 0 K. El crecimiento de este calor a partir de 0 K es inicialmente muy rápido, haciéndose después más lento hasta que se alcanza una temperatura que puede corresponder a la de fusión, a la de descomposición o a un cambio de estructura (Ley Dulong -Petit)
El calor específico de los sólidos (igual que el de los gases
y líquidos) es función creciente de la temperatura,
tendiendo a cero cuando ésta se aproxima a los 0 K. El
crecimiento de este calor a partir de 0 K es inicialmente
muy rápido, haciéndose después más lento hasta que
se alcanza una temperatura que puede corresponder a
la de fusión, a la de descomposición o a un cambio de
estructura (Ley Dulong -Petit)