Qué cápsula del tiempo más bella. Quizá en el año 2074, cuando muchos de nosotros estemos descansando en los brazos de Cristo, los hermanos de ese entonces, al ver este video, puedan saber que alabábamos a Cristo de la misma forma. Nosotros pasamos pero la palabra de Dios prevalecerá por siempre.
Qué cápsula del tiempo más bella. Quizá en el año 2074, cuando muchos de nosotros estemos descansando en los brazos de Cristo, los hermanos de ese entonces, al ver este video, puedan saber que alabábamos a Cristo de la misma forma.
Nosotros pasamos pero la palabra de Dios prevalecerá por siempre.