10 Mejores playas de Cataluña

Cataluña es una población con un gran encánto a nivel de playas, ya que está bañada por más de 500 Kilómetros de playas, acantilados y calas. Así que ya os podéis imaginar, que con tanta costa hay espacio para muchas playas y calas magníficas; muchas de las cuales están aisladas y rodeadas de vegetación, otras tienen increíbles pueblos detrás.
Así que con tanta variedad, vamos a deciros cuales son las 10 mejores playas de toda la costa catalana.
En 10ª posición tenemos la Cala de Illa Roja en Begur, una cala que para acceder, hay que dar un paseo desde el camino de ronda. Cuando la veáis, la reconoceréis de inmediato: es singular por los colores rojizos de la roca que emerge del agua. Está rodeada de acantilados, así que no escucharéis ruidos más allá de los producidos por el mar, por lo que, para los amantes de la tranquilidad es ideal. Por cierto, es importante indicar que es de tradición nudista.
En la 9ª posición, tenemos a Cala Estreta en Palamós.
Hay quien dice que es la cala de la cual, los de la comarca del Baix Empordà, al norte de Cataluña, están más orgullosos. Y si alguna vez la visitáis entenderéis el por qué: es realmente preciosa. Ahora bien, como toda recompensa, requiere un esfuerzo, porque durante los meses de verano no podréis ir allí con vehículo motorizado y tendréis que andar unos tres cuartos de hora desde la playa del Castell. Comentar también, que es habitual que haya nudistas.
En 8ª posición, encontramos la Cala Tavellera en el Port de la Selva.
Sólo accesible a pie por el Cap de Creus, el punto más oriental de la península Ibérica, la excursión a Cala Tavellera compensa por el aislamiento del lugar, la belleza del mismo, y por un fondo marino con una espesa pradera de posidonia. Por si se os hace tarde, deciros que incluso hay un refugio para pasar la noche, y así poder asistir al alba, como decía una canción, una experiencia religiosa.
En la 7ª, tenemos la Playa del Portitxol que se encuentra entre la Escala y Sant Martí d'Empúries.
Portitxol es un bonito arenal de aguas tranquilas, ideal para ir con niños, tiene arena fina , y está rodeado por un bosque de pinos que llega prácticamente al mar. La playa está protegida a lado y lado, por formaciones rocosas, y no es extraño que tanto griegos como romanos montaran aquí mismo poblaciones destacadas. Historia, patrimonio y belleza natural convergen en el lugar.
En 6ª posición, tenemos la Playa de l'Home Mort, la cual se encuentra al sur del municipio de Sitges, en la comarca del Garraf. La playa del home Mort se compone de dos playas separadas por un pequeño barranco rocoso y que dibujan una bahía abierta. La playa de l'Home Mort junto a la playa de Roses, suman unos 300 metros de largo, pero no superan los 10 de ancho, y una vez metidos en el agua veréis que el fondo es poco profundo y formado por pequeñas rocas y arena.
En 5ª posición, tenemos la Cala Culip en el precioso pueblo de Cadaqués.
Fue una playa privada hasta el año 2004, cuando cerró el Club Med. Ahora que todos podemos sumergirnos en sus aguas, qué mejor que acercarnos a esta cala situada en los parajes relacionados con Salvador Dalí, y poder disfrutar de las aguas cristalinas y de la pequeña playa de arena gruesa.
Acercándonos a la primera posición, nos encontramos en 4ª posición con la Cala Justell en l'Hospitalet de l'Infant.
Cala que también se conoce con el nombre de Gestell, de perfil rocoso y salvaje, y con dunas, arena fina y dorada y piedras en sus 170 metros de longitud. La vegetación llega a tocar la playa, y está ubicada en una zona húmeda catalogada como paraje natural de humedales.
En 3ª posición , tenemos Playa de l'Illot en l'Ametlla de Mar.
En la Costa Daurada predominan las playas de arena muy fina y suave pendiente, aquellas en las que tenéis que andar muchos metros mar adentro para que el agua os llegue al ombligo. Pero de vez en cuando, el litoral se rebela y ofrece sorpresas, como la playa de l'Illot ('islote'), al sur de la Ametlla de Mar, una pequeña cala de guijarros con un roquedal rojo que la rodea y los pinos que llegan a ras de agua. Y, claro, el islote, emergiendo entre las olas, que todavía hace el paisaje más bucólico.
En 2ª posición, tenemos a la Playa Fonda en Begur.
Pequeña cala de la Costa Brava en estado "salvaje". Para acceder a ella hay que bajar unas cuantas escaleras, como recomendaciones importante tener en cuenta que si vais con niños o gente mayor, no será la mejor cala. Encontraréis un agua de tonalidades oscuras, con una arena también oscura y gruesa. Pero lo que le da más singularidad es el acantilado que protege el lugar y le proporciona sombra a lo largo de muchas horas.
Y por fin, en 1ª posición tenemos la Cala de Cap Roig en Sant Antoni de Calonge.
El nombre le viene dado por el islote de color rojizo que separa la playa en dos zonas. Además, y ajeno a los bañistas, el islote está coronado por pinos que le dan aún más personalidad.