El árbol y las hormigas (Cuento de relajación infantil)

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INSTRUCCIONES Y UTILIDAD DEL CUENTO
El árbol y las hormigas es un cuento de relajación infantil inspirado en la técnica de relajación muscular progresiva de Jacobson. La historia trata de unas hormigas que pierden su poblado debido a una fuerte tormenta. Éstas, con las cuatro pertenencias que les quedan, se adentran en el bosque con el objetivo de encontrar un nuevo lugar para vivir.
Durante el trayecto encuentran un árbol llorando desconsoladamente porque está completamente echado en el suelo y no se puede levantar. Es aquí donde las hormigas le ayudarán a desarraigarse para que pueda ser libre. Es un cuento entrañable que no sólo se centra en la relajación sino también en los valores que nos hacen ser humanos: la solidaridad, la cooperación, el trabajo en equipo, el vínculo y las emociones.
ÁMBITOS DONDE SE PUEDE APLICAR
Es aconsejable que esta técnica se aplique en un espacio tranquilo y neutro que favorezca la relajación.
En la escuela:
Se pueden hacer grupos de 3 o 4 niños. Uno de los niños de cada grupo se sitúa en el centro, totalmente estirado para que adquirirá el papel de árbol arraigado. El resto de compañeros del grupo harán de hormiguitas. La técnica comenzará en el momento del cuento en que las hormigas ayudarán al árbol a levantarse.
Es importante que en el momento de aplicar la técnica, el profesor haga de modelo para que los alumnos puedan tener un referente visual.
En casa:
Es aconsejable que esta técnica se aplique en un lugar tranquilo de la casa, preferiblemente con una luz tenue, libre de aquellos estímulos que puedan ser distractores o estimulantes para el niño.
El niño se coloca estirado, por ejemplo en su cama, y ​​el padre o la madre pueden hacer de hormiguitas. Durante la aplicación de la técnica, se puede hacer el acompañamiento sensorial utilizando una pluma, simulando el movimiento de las hormigas.
Técnica de relajación explicada en el cuento:
Las hormigas, que son muy trabajadoras, se arremangaron e intentaron echar una mano a árbol. Una de ellas, la reina ‘Baldufa’, se puso a dirigir la maniobra que las otras iban realizando. Todas ellas, decididas, se dirigieron hacia la cabeza del árbol y le dijeron:
Amigo, cierra los ojos e imagínate un momento, un sueño, una ilusión que te haga sentir alegre y feliz.
Entonces, el árbol un poco desconfiado, hizo lo que las hormigas le dijeron.
Unas cuantas se acercaron hacia los ojos y le dijeron:
Cierra los ojos tan fuerte como puedas. (pausa de 5 segundos) Poco a poco ve dejando de hacer fuerza (pausa de 3 segundos) Nota como esta sensación te hace sentir más libre.
-Ahora, encoge la nariz tan fuerte como puedas. (pausa de 5 segundos) Poco a poco ve dejando de hacer fuerza. (pausa de 3 segundos) Nota como esta sensación te va liberando.
Aprieta la boca tanto como puedas. (pausa de 5 segundos) Poco a poco ve dejando de hacer fuerza. (pausa de 3 segundos) Nota como esta buena sensación recorre toda tu cara.
Ahora, como si de un globo se tratara, coge aire por la nariz (pausa de 3 segundos) y lentamente saca el aire por la boca. (pausa de 3 segundos). Nota el recorrido que hace el aire por tu cuerpo.
Las hormigas, con suavidad, se dirigieron hacia las ramas del árbol y le dijeron:
Estíralas tanto como puedas. (pausa de 5 segundos). Poco a poco ve dejando de hacer fuerza. (pausa de 3 segundos). Nota como esta sensación te hace sentir bien.
Después, siguieron por el tronco y le dijeron:
Arquea la espalda tanto como puedas. (pausa de 5 segundos). Poco a poco ve dejando de hacer fuerza. (pausa de 3 segundos). Nota como la espalda se desengancha del suelo.
Como si de un globo se tratara, coge aire por la nariz (pausa de 3 segundos) y lentamente saca el aire por la boca. (pausa de 3 segundos). Nota el recorrido que hace el aire por tu cuerpo.
El árbol, todo contento, iba siguiendo las órdenes de las hormigas. No se lo podía creer, volvía a ser el árbol alegre y feliz que había sido tiempo atrás.
Las hormigas le preguntaron:
Quieres ser totalmente libre? Sentirte más libre que cualquiera de los árboles que están a tu alrededor?
El árbol respondió:
Me encantaría ser totalmente libre para poder ver mundo. Entonces, las hormigas, todas juntas, incluida la reina Baldufa, se dirigieron hacia las raíces y le dijeron:
Estira tanto como puedas las raíces. (pausa de 5 segundos) Poco a poco ve dejando de hacer fuerza.
De repente, el árbol hizo un paso, otro y otro, hasta que comenzó a caminar. Entonces, una hormiguita le preguntó:
A que no está tan mal ser diferente?
Esto hizo pensar al árbol y respondió:
Estoy contento de ser diferente.