Las locas de Plaza de Mayo
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- เผยแพร่เมื่อ 12 ก.ย. 2024
- Las fotografías y el texto de mi expo "Las locas de Plaza de Mayo".
El viernes 27 de abril desfilan estas fotos en el concierto de Silvio Rodríguez, en el barrio de La Lisa, La Habana.
Gracias SIEMPRE a Leandro Estupiñán Zaldívar, Mai López y Mónica Rivero por la mirada y edición certera del texto.
Gracias y GRACIAS a Mariana Licursi por reinventarte a contratiempo para acomodar el texto y los versos.
Gracias INMENSAS a Lucía Fernández Cívico, por su voz para este video.
Gracias TOTALES a ese musicazo cubano que es el pianista Alfredo Rodríguez, por la sublime versión del tango "Adios Nonino", incluido en su disco Tocororo y que si que aún él lo sepa, tomé prestado para acompañar estas fotos.
Gracias GIGANTES al maestro Eduardo Longoni, del que tomé un texto para completar mi escrito.
Las locas de Plaza de Mayo
Texto y foto: Kaloian
Los verdugos no eran capaces de calcular que aquellas señoras -entonces sin militancia política- que reclamaban desesperadas conocer el paradero de las hijas y los hijos arrancados de sus hogares, se convertirían en el principal símbolo de resistencia de uno de los genocidios más terribles de la historia: la sangrienta Dictadura Cívico-Eclesiástico-Militar que entre 1976 y 1983 imperó en la Argentina.
Los represores las llamaron “locas”, porque cuando se impuso el Estado de Sitio y Terror, cubiertas con pañuelos blancos y cargando las fotos de sus desaparecidos como estandarte, daban la vuelta a la pirámide de la Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, en Buenos Aires. No parecían estar en su sano juicio un grupo de mujeres que, sin más defensa que su propio cuerpo y el hecho de tenerse unas a las otras, rompieran el silencio y se sobrepusieran al terror que infundían la tortura, el asesinato y la desaparición. A algunas, de hecho, las hicieron pagar el precio de su valentía y tuvieron el mismo destino de los hijos que reclamaban.
Como repuesta a la descalificación de los militares, en 1982 el escritor Julio Cortázar publicó en el periódico La República de París el artículo Nuevo elogio a la locura, donde escribió: “...la locura merece ser elogiada cuando la razón, esa razón que tanto enorgullece al Occidente, se rompe los dientes contra una realidad que no se deja ni se dejará atrapar jamás por las frías armas de la lógica, la ciencia pura y la tecnología. (...) Sigamos siendo locos, madres y abuelitas de la Plaza de Mayo, gentes de pluma y de palabra, exiliados de dentro y de fuera. Sigamos siendo locos, argentinos: no hay otra manera de acabar con esa razón que vocifera sus slogans de orden, disciplina y patriotismo. Sigamos lanzando las palomas de la verdadera patria a los cielos de nuestra tierra y de todo el mundo”.
Las estadísticas entregadas por Madres y Abuelas de Plaza de Mayo e Hijos de desaparecidos registran que el régimen dictatorial provocó la muerte y / o desaparición de 30.000 personas. Entre 400 y 500 bebés fueron secuestrados junto a sus padres o nacieron durante el cautiverio de sus madres embarazadas y luego desaparecidas.
Con casi un siglo a cuestas, encorvadas, con un paso lento auxiliado por bastones, en silla de ruedas, sin importarles las inclemencias del tiempo, los gases lacrimógenos o las balas, las “locas” siguen en la calle, obstinadas, peleando por las causas sociales, la memoria y contra el olvido.
“Hoy ellas son el faro que sigue echando luz sobre aquella interminable noche. Recuperaron 127 nietos, lograron saber en algunos casos qué fue lo que ocurrió con sus hijos y lucharon incansablemente para que cientos de genocidas, más allá de las marchas y contramarchas de los políticos, estén presos y tengan además la condena de toda la sociedad. Las Madres y las Abuelas ya están grandes, muchas están muy viejitas, aprovechemos a que aún las tenemos entre nosotros para ver si nos contagiamos de su entereza y golpeamos todas las puertas, caminamos todos los caminos y luchamos todas las luchas”, escribe el fotoperiodista Eduardo Longoni, que las ha acompañado con su cámara desde el inicio.
Las Madres y Abuelas de Plaza de mayo son un faro de lucha y resistencia pero también la memoria viva que duele. ¿Y para qué sirve el dolor? Para ser una alerta, para recordarnos lo que no podemos permitir que vuelva. - ภาพยนตร์และแอนิเมชัน
Honor y gloria eternos al Señor Teniente General don Jorge Rafael Videla.....!!!!!!
Ni eran 30.000 ni eran tan inocentes
Gloria eterna a las Madres de Plaza de Mayo!
Les contaron mal la historia.
Y los policías y gente que mataron los montoneros?