IV Premio Nacional de Poesía Viva

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  • เผยแพร่เมื่อ 19 ก.ย. 2024
  • "¿Para qué sirve el amor si no me lo hace nadie?" y "Lluvia en el desierto" escritos por Irene Díaz Lázaro y recitados por Irene Díaz Lázaro en Ámbito Cultural Callao para el IV Premio Nacional de Poesía Viva #LdeLírica el 11/06/2022.
    Fragmento sacado del vídeo emitido por Ámbito Cultural: • IV Premio Nacional de ...
    Recitar en Ámbito Cultural fue una experiencia maravillosa, y escuchar a los otros semifinalistas aún más. Mil gracias por la oportunidad. Estoy tremendamente agradecida.
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    ¿PARA QUÉ SIRVE EL AMOR SI NO ME LO HACE NADIE?:
    ¿Sirve el amor si no te lo hace nadie?
    ¿Sirve todo este show de hacer como que me quiero
    si nadie me lo compra?
    ¿Si no lo capitalizo?
    ¿Si no lo monetizo?
    ¿Si nadie me aplaude?
    Los escenarios me riegan solo
    cuando oigo ovaciones y me pregunto
    ¿para qué sirve la poesía si no te hace el amor
    - o el odio -
    cuando no lo ve nadie?
    ¿Para qué sirven las flores que son solo flores y no producto?
    ¿Para qué sirve todo lo que existe fuera del mercado,
    las flores que crecen entre las grietas del cemento,
    los poemas que no lee nadie,
    yo, queriéndome, cuando no me mira nadie y nadie me lo compra?
    Tú dices “poesía comercial”,
    yo oigo “eslogan”,
    yo oigo átomos dispersos, disolutos, que se buscan (nunca se encuentran),
    yo oigo la imposibilidad de lo colectivo (no os encontréis nunca, es una orden),
    yo oigo “ni el amor ni la poesía sirven si me los hago yo y no me mira nadie”,
    yo oigo “soy un escaparate andante”,
    oigo “ponme precio”.
    Tú dices “poesía comercial”;
    yo digo “¿para qué sirve el amor si no me lo hace nadie?”
    Para nada: eso no vende.
    LLUVIA EN EL DESIERTO:
    Señoría,
    necesito que entienda Usted
    que yo nunca pedí estar aquí,
    Que odio la existencia,
    la corporeidad,
    la responsabilidad que se te adjudica al nacer
    y que yo nunca he pedido ni querido tomar;
    que quiero volver a tener cinco años,
    quiero estar…
    no quiero ser.
    Anhelo la sensación de ser un alma
    y no un cuerpo.
    Quiero arañarme desde dentro hasta salir,
    dejar esto que concibo como una cárcel,
    que me oprime, me hace daño, me fustiga.
    Sólo noto latigazos cuando intento acariciarme.
    Quiero salir pero no sé a dónde,
    ¿a dónde va uno cuando deja atrás su piel?,
    ¿qué hace uno sin esqueleto,
    sin pulmones,
    sin pies que le lleven a donde quiere estar?
    Señoría, ¿a dónde voy?
    Odio mirarme al espejo
    y reconocerme.
    Todo eso que me grita la carne y que odio
    odio
    odio
    con toda mi alma
    y todo mi ser.
    La realidad de no ser un concepto,
    de ser una bola de sesos y sangre… y alguna idea.
    Y como no tengo síndrome de Estocolmo,
    a esto que me contiene sin matarme no lo amo.
    El espejo me deslumbra y me deslumbra y me deslumbra y me des…
    hace…
    y me deshago
    como las migas del pan en la encimera,
    como un trozo de papel mientras se quema:
    combustión constante,
    como modo de vida,
    como religión,
    como ataraxia.
    La dicotomía entre quererme
    y odiarme
    y pensar que me odio únicamente porque intenté quererme
    (¿me salió mal?).
    Pensar que si me quemo para dejar de existir
    terminaré por destruir las migajas de amor propio que me quedan
    y probablemente intentando esnifarme las cenizas.
    No quiero tener que cumplir promesas que nunca he querido hacer,
    tener que cumplir lo establecido en un contrato que yo no he firmado pero lleva mi nombre
    y ¡Señoría, le están mintiendo! … yo nunca pedí existir.
    O no así, al menos.
    Solo quiero ser etérea.
    ¿Es tanto pedir?
    Me aterra este cuerpo que necesita,
    esta existencia insaciable
    que siempre quiere más
    y siempre necesita más
    y siempre me pide más
    y cuando creo que me está dando un respiro
    se marea,
    siente como le flota la cabeza
    y se acuerda de que es una máquina hecha de carne
    y que sin gasolina no funciona
    y yo me he quemado los motores
    y odio la combustión
    y el petróleo
    y las carreteras
    y todo lo que existe y es…
    y…
    Sin embargo, amo
    la sensación del aire entrando a trompicones en mis pulmones cuando dejo de correr
    y me dejo respirar
    y pienso que puede que si respiro muy fuerte,
    muy de golpe,
    muy rápido…
    puede que si tengo suerte me convierta en una nube,
    en el viento,
    en una borrasca,
    en una tormenta de verano.
    Señoría,
    por favor, explíqueme Usted
    por qué me meten voces en la cabeza
    e ideas que no sé si son mías.
    Pienso que sólo cuando corra hacia la caída
    me quedaré tranquila,
    y que esta es la única manera para quererme… precipitándome.
    No sé qué digo yo y qué me invento
    y necesito,
    Señoría,
    un poco de silencio.
    Puede que si me quedo muy muy callada
    y muy muy quieta,
    si cierro los ojos
    y no respiro
    y me pongo recta,
    de puntillas,
    mi nariz apuntando al cielo…
    si tengo suerte, Señoría,
    creo que podría convertirme en una gota que llueve en el desierto.
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    Página web: irenediazlazar...

ความคิดเห็น • 7

  •  2 ปีที่แล้ว

    El poema de señoría, de mis favoritos del certamen y en general también. Gracias por subirlo 🤗

    • @irenediazlazaro
      @irenediazlazaro  2 ปีที่แล้ว

      Muchísimas muchísimas gracias a ti por escucharme! :)

  • @Jaime-ns3yk
    @Jaime-ns3yk 2 ปีที่แล้ว

    👏👏👏

  • @zurrusculuslukityzurruscul1785
    @zurrusculuslukityzurruscul1785 2 ปีที่แล้ว +2

    Muy malo y politizado hasta el vómito

  • @gemamayordomo4461
    @gemamayordomo4461 2 ปีที่แล้ว

    Como puede decir tanto un poema conolejos tca suicidio ns quizas me equivoco

    • @irenediazlazaro
      @irenediazlazaro  2 ปีที่แล้ว

      Gracias :) Y el tema… está abierto a interpretación; no tiene por qué significar lo mismo para mí que para la persona que lo lee. Gracias por escucharme