José Luis Doreste: “Las regatas se planifican y luego … hay que tener suerte”

แชร์
ฝัง
  • เผยแพร่เมื่อ 16 ก.ย. 2024
  • El medallista olímpico José Luis Doreste Blanco (Las Palmas de Gran Canaria, 1958) -Josele Doreste - es una leyenda de la vela mundial nacido en Canarias que continúa en activo, a pesar de que ha rebasado ya los 60. Josele sigue en forma y ganando regatas: en 2021 se proclamó campeón mundial de la clase ILCA en categoría Grand Master y en 2018 logró el mismo resultado en Finn, su barco fetiche.
    Su medalla de oro en los JJOO de Seúl de 1988 no fue la primera de la vela canaria, (su hermano Luis había ganado el oro cuatro años antes en Los Ángeles 84 con Roberto Molina), pero sí la única de ese metal para España en la cita coreana, y la repercusión fue extraordinaria. Tanto que aún resuena.
    El mayor de los hermanos Doreste protagoniza una nueva entrega de la serie “Los nombres de la vela canaria” que la Real Federación Canaria de Vela publica en su canal de TH-cam. Es médico deportivo de profesión y reside en Barcelona desde los tiempos de la Blume, cuando los pioneros de la vela ligera isleña obtuvieron una beca para preparar los Juegos de Montreal de 1976, los de Nadia Comaneci.
    Josele ha participado en cinco Juegos Olímpicos incluyendo el oro de Seúl 88 , y como regatista profesional ganó tres mundiales y dos europeos entre 1982 y 1987, primero en la clase Star y luego en Finn.
    En esta entrevista, realizada en el Centro Canario de Vela Manolo Pazos Díaz que gestiona la RFCV en el muelle deportivo de Las Palmas de Gran Canaria aprovechando una de sus visitas a la isla, el regatista habla de sus inicios - (…) “mi primera sensación de asombro, de poder dominar yo una embarcación”-; de cómo de repente se vio envuelto en la “madeja” de la competición de alto nivel; de los regatistas que admira; de cómo ganar una regata - “se planifica (…) y luego … hay que tener suerte”- y, entre otros asuntos, de por qué el Finn es su barco preferido.
    Y si se le pregunta por su mejor recuerdo o por el triunfo que más valora acude a la última regata de los Juegos Olímpicos de Séul, la que le dió el oro y en la que tuvo “que luchar como un loco” para que el representante de EEUU no le robara el liderato en el último momento. De haber sucedido así, subraya, la historia de su vida habría sido diferente.
    Entre otras distinciones, tiene la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo, lo que le confiere el tratamiento de Ilustrísimo Señor. Asegura que seguirá navegando “hasta que el cuerpo aguante”.

ความคิดเห็น •