La danza es un lenguaje universal que nos conecta a todos, y como artista, hay algo profundamente mágico en poder compartirlo con aquellos que nos quieren y aprecian. Cada vez que me subo al escenario, especialmente al bailar el raks al shamadan, lo hago con el corazón lleno de gratitud y emoción.
Bailar para quienes valoran mi arte transforma cada movimiento en una celebración compartida. Es un intercambio hermoso: yo ofrezco mi pasión, mi historia y mis raíces a través de la danza, y ustedes, con su presencia y energía, me devuelven ese amor en forma de aplausos. Esa ovación al final de la actuación no es solo un reconocimiento a mi trabajo; es un abrazo colectivo que me recuerda por qué elegí este camino.
Cada aplauso resuena en mi alma y me motiva a seguir explorando y compartiendo la belleza de nuestras tradiciones. La danza se convierte así en un puente entre culturas, una forma de conectar corazones y celebrar la diversidad que nos une.
Así que, a cada uno de ustedes que asistieron y apoyaron nuestro Hafla del Reencuentro en Hotel Terrado Antofagasta, gracias por ser parte de este viaje. Su apreciación hace que cada ensayo valga la pena y cada presentación sea inolvidable. Juntos, sigamos creando momentos mágicos donde la danza nos una y nos inspire a seguir celebrando nuestras raíces. 💖✨