Un método experimental y sencillo para obtener biochar o bio carbón en la finca. Y de paso, quemar las ramas de las podas. Los troncos se deben pirolizar en principio. O sea que habría de conseguirse una semicombustión en un ambiente libre de oxígeno. Para eso se cava el agujero y se disponen los troncos (max.8cm grosor) intentando que no queden huecos entre ellos. El calor que se consigue con el fuego superior se transmite a los troncos inferiores (pirólisis) sin llegar a consumirlos, idealmente a una temperatura inferior a los 500º. El resultado es un tipo de carbón brillante que ha de ser luego machacado y activado para su incorporación al suelo en la huerta.