En la vida hay de miradas a miradas, miradas indiferentes, miradas altaneras, miradas profundas, miradas llenas de ternura, miradas de dolor, miradas de maternales, y miradas que te cambian la Vida.
Aun recuerdo aquel tiempo en el que Jesucristo me miró como nadie, como Padre, como amigo, como maestro con la mirada mas profunda y llena de ternura que me transformo, que me llamo, que me invito a seguir sus pasos, que lleno mi corazón de su Amor.
El llamado de Dios es una invitación donde o te subes a la barca o te sigues de largo, el camino de Dios esta llena de miradas que a veces te retan a ir mas halla de la tempestad y confíar que ahi tambien esta El que no todo tiene que ser siempre perfecto y conforme a nuestra voluntad.
El camino que Dios traza en la vida de cada uno es siempre un paso en fe, y una mirada que sabe corresponder, una mirada fija en El y nadie mas que en El, si fijamos la mirada fuera de El, dejamos de verle de escucharle, de sentirle, perdemos el enfoque, la mision, nos desviamos fácilmente de las huellas que nos llevan por el camino de su voluntad.
Hoy doy gracias a Dios que me conoce y me ha llamado por mi nombre, no solo a mi si no a todo aquel que se deja ver y descubrir por quien todo es, sabe y que a su vez nos da la libertad de conocerle, servirle y amarle y aunque algunas veces le perdemos de vista el siempre nos esta cuidando y esperando volvamos hacia el la mirada.
Este canto me lleva y espero también te lleve a recordar ese momento donde por primera vez sentiste el llamado de Dios, ese momento donde experimentaste por primera vez su presencia y su amor. Que sepas siempre volcarte a ese primer Amor que es la base de tu seguimineto y discipulado.
Y que nos lleve también a dar gracias por los instrumentos de los que Dios se ha valido para tocar nuestras vidas. Pues somos sus manos, sus ojos, su voz, sus pies. Y necesita de cada uno para seguir llamando a todo aquel que le esta buscando pero no ha escuchado la llamada.
Una Tarde Como Tantas/ La Llamada
Una tarde como tantas el paso
Y mirando tiernamente me miro
No era un hombre como tantos no uno más
Invitandome a su barca me llevo
Yo no se como decirlo,
Si decirlo o si no, solo se
que pronuncio mi nombre
Y aqui estoy sola ante ti
Meditando aquello que oi
Se que debo de dejar
las redes en el mar mi timón
ya desde hoy lo tomaras
Y después de aquella tarde le seguí
Y dejando mi pasado descubri
Que Jesús aquella tarde me llamo
El tenia nueva vida para mi
Una vida de servicio
de pureza y santidad
y me pide nunca mire
hacia atras
Y aquí estoy sola ante ti
Meditando aquello que oi
Se que debo de dejar
las redes en el mar
mi timón ya desde hoy
lo tomaras
Desde aquel pequeño instante
hasta hoy
Voy perdiendo mi existencia
en lo que soy
Soy un pajaro que vuela en libertad
Soy un barco que navega en alta mar
Soy apóstol soy guerrero
Pregonero de su amor
Solo se que pronuncio mi nombre
Y aquí estoy, solo ante ti,
Meditando aquello que oi
Se que debo de dejar
Las redes en el mar mi timón
Ya desde hoy lo tomaras
Yo no se si su mirada
Su manera de vivir,
Solo se que mi respuesta,
Es un sí…